Uno de los hombres más cercanos a ella habría tratado de aprovecharse de la artista para disponer de su fortuna a su antojo. El joven asistente de la actriz Gina Lollobrigida, Andrea Piazzolla, de 32 años, será juzgado por dilapidar el patrimonio de la intérprete, tal y como pedían sus familiares y la Fiscalía de Roma. Se habría aprovechado de la avanzada edad, tiene 93 años, y el estado psíquico de la mítica intérprete para hacerlo. Tal y como informaron a EFE fuentes del caso, la jueza de la audiencia preliminar, Emanuela Attura, encargada de decidir la apertura de un juicio formal, dispuso que la primera vista será el 1 de diciembre en el Tribunal de Roma.
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La Fiscalía había solicitado que el caso llegara al juzgado después de recibir los resultados de una investigación iniciada por la denuncia del único hijo y el nieto de la actriz, Milko y Dimitri Solfic, y por su exmarido, el empresario español Javier Rigau. Piazzolla está acusado del delito de "aprovecharse de una persona incapacitada", que está penado con entre dos y seis años de cárcel a quien "se procure a sí o a otros un beneficio abusando de las necesidades, pasiones o inexperiencia de un menor o abuse del estado de enfermedad o deficiencia psíquica de una persona". Los investigadores creen que el asistente está expoliando el inmenso patrimonio que tiene la italiana "aprovechando su estado de debilidad psíquica" y aislándola de sus allegados.
Elevado tren de vida y compras de lujo
En la investigación de la Fiscalía, cuyo informe data el 20 de febrero de 2019, consta un largo historial de operaciones bancarias y compras entre 2013 y 2018 atribuidas a Piazzolla, que no esconde el alto tren de vida que lleva en sus redes sociales. Según los documentos, el joven se hizo nombrar administrador de una sociedad que gestiona los bienes de la actriz y en 2015 vendió tres inmuebles cerca de la Plaza de España romana por un valor total de 2,1 millones de euros. Además figuran retiradas de dinero en efectivo, transferencias a su nombre y a sus padres, a los que envió 119 000 euros, y compras de coches de lujo, como un Ferrari. La actriz sin embargo ha defendido en numerosas ocasiones su lucidez y ha eximido a su asistente de estas alegaciones.
En medio de esta disputa entre la familia y el joven ayudante, la justicia autorizó en mayo a un administrador a gestionar su patrimonio y requisar los objetos de valor de su villa para evitar que sean dilapidados. Esta decisión se produjo después de que algunas piezas de su patrimonio, recaudado durante más de seis décadas de carrera, fueran puestas a subasta. Lollobrigida remitió entonces un comunicado a los medios en el que lamentaba esta medida: "Han decidido que muera de un modo innoble como se hace con los delincuentes. En un país civil no es tolerable que se den abusos tan graves e injustos", denunciaba. Esa decisión la empuja, aseguraba, a vivir "en una inevitable condición de precariedad y evidente disgusto" en su mansión, en la Appia Antica de Roma, y desprovista de "los recuerdos que la han acompañado durante toda su vida", señalaba la nota.
Lollobrigida es una de las grandes estrellas de la cinematografía italiana y cuenta en su filmografía con títulos como Salomón y la reina de Saba (filmada en España en 1959 y donde actuaba el estadounidense Tyrone Power, fallecido en pleno rodaje), La romana (1954) y Cuando llegue septiembre (1961). Está divorciada desde 1981 del médico yugoslavo Milko Scofic, con quien se casó en 1949 y con el que tuvo a su único hijo, Andrea Milko, que nació en 1957.