Carla Pereyra ya habían inaugurado el verano con sus hijas dándose un chapuzón en la piscina de su casa de Madrid, pero ahora que ya no está restringida la movilidad, ha elevado la apuesta y, sin duda, ha ganado. Misma compañía, bañadores igualmente elegantes y vistosos, pero cambiando Madrid por Ibiza, la piscina por el Mediterráneo y el jardín por una barbacoa en un yate. Con estos ingredientes no es de extrañar que lo único que no haya resistido al cóctel haya sido el peinado, porque como ella misma ha dicho: "¡La felicidad despeina!".
Carla Pereyra da la bienvenida al 'casi verano' con un espectacular posado familiar
Tras varios meses de confinamiento, el primer contacto con el agua salada de Carla y sus hijas ha sido en una cala de aguas cristalinas. "Primer baño de mar de este verano 2020. El agua limpia y purifica", escribía la modelo junto a unas imágenes en las que posa en unas rocas, con un biquini blanco de cintura alta y gafas de sol, y con su hija Francesca, muy sonriente, sobre su regazo. Además, de disfrutar de la playa, el fin de semana también incluía una jornada en alta mar con amigas, entre las que se encontraba Natalia, la hermana de su marido Diego Pablo Simeone. "¡La felicidad despeina! ¡Reir a carcajadas, bailar, jugar y saltar al agua! ¡Felices y agradecidas!", publicaba junto a unas fotos con su hija mayor sentadas en la proa del barco con el pelo alboratado y una gran sonrisa.
Además de bañarse, tomar el sol y relajarse, cuando dos argentinas se juntan da igual que estén en tierra, mar o aire que se hace una barbacoa. Era la guinda ideal a un día en el que solo faltaba la presencia de Simeone para ser perfecto. El técnico del Atlético de Madrid debía cumplir con sus compromisos profesionales, pero a buen seguro le llegó la energía de su familia, qeu ha dejado de animarle desde Ibiza, pues se hizo con la victoria frente al Alavés.
Tiempo de aniversarios
Hace apenas dos semanas que la pareja celebraba el primer aniversario de la boda civil en la que se dieron el 'sí quiero' en Buenos Aires, la ciudad que les vio nacer, rodeados de su familia y amigos. Para celebrarlo, el entrenador sorprendió a su esposa con un ramo de flores rosas. No obstante, es mejor que reserve fuerzas, porque pronto viene otro aniversario, ya que tres meses después de esa ceremonia íntima, celebraron una gran boda en la Toscana, que contó con la presencia de muchos rostros conocidos entre los invitados como Valeria Mazza, Alejandro Gravier, Ana Antic, Teresa Baca o Enrique Cerezo.