Anabel Pantoja ha pasado la cuarentena en su casa de Canarias junto a su pareja, y desde allí ha amenizado el confinamiento a sus seguidores con mucho humor y algunos vídeos de entrenamiento que llegaron a ocupar una sección propia en Sálvame. Sin embargo, su vuelta a los platós no fue como esperaba. Poco antes de su reaparición televisiva, la colaboradora subía a su cuenta de Instagram un vídeo en directo después de un día de fiesta con amigos, en el que se le veía visiblemente afectada y con dificultad para leer los mensajes. Aunque a la mañana siguiente decidió borrar el vídeo, la producción del programa ya se había hecho con el material y aprovechó su regreso para analizarlo con ella en directo.
"Me avergüenza, no quiero mirarlo porque me acuerdo de mis padres y de mi negro", decía la sobrina de Isabel Pantoja en aquel momento, mientras veía las imágenes y se tapaba la cara con las manos. Muy arrepentida, ha continuado con su labor de tertuliana en el espacio de las tardes de Telecinco, y nuevamente ayer el polémico vídeo volvió a protagonizar su participación. Esta vez, a causa de las reacciones que ha tenido por parte de su familia. "¿Qué te ha dicho tu tía del directo?", se ha interesado Jorge Javier Vázquez. "Me riñó, solamente te digo que me mandó un audio de siete minutos y medio".
"Como una madre, me dijo las cosas claras, por dónde tenía que ir, lo orgullosa que está por lo que he conseguido y que no la cagara por este tipo de actitudes, no me quiere ver jamás en la vida así", ha contado la diseñadora a sus compañeros y a todos los espectadores. Una reprimenda que, ha asegurado, también ha recibido por parte de su madre. El polémico vídeo ha afectado enormemente a Anabel Pantoja y, aunque sus allegados han sido duros con ella por el contenido y el estado en el que lo grabó, sus primeras reacciones fueron de preocupación, interesándose por cómo se encontraba tras la emisión: "Lo primero que hizo mi familia fue llamarme y preguntarme cómo estaba porque vieron la semana que pasé y después de eso ya vino la caña. Pero ya está todo solucionado".
Una de las cuestiones que más han herido a la sobrina de la tonadillera ha sido verse hablando mal a su pareja. En las imágenes se puede comprobar cómo su novio intenta frenar el directo sin éxito y cómo ella le dirige malas palabras. Ayer confesaba con humor que "a partir de las 23.15 de la noche no se puede coger el móvil y cuando haya salero se lo doy directamente a mi novio y ya está".