Tras dos meses alejada de las redes sociales, Amanda Bynes ha vuelto a compartir noticias con sus seguidores. La que fuera protagonista de Ella es el chico ha solventado las dudas sobre su relación, después de unas sonadas idas y venidas y de un embarazo que finalmente no fue tal. "Aún comprometida con el amor de mi vida, Paul", zanjaba la actriz después de explicar en qué situación se encuentra en el proceso de recuperación de sus adicciones en el que está inmersa. Afortunadamente, el tratamiento parece ir viento en popa y, aunque asegura que continua en terapia, tiene muchos planes para el futuro y no pasan por la vuelta al cine.
"Actualización: Sacándome mi grado en Instituto de Diseño de Moda y marketing, llendo a clases online, intentando sacar un cuatro de nota media. Deseando montar mi tienda online como uno de los objetivos para el futuro. Pasé los últimos dos meses en tratamiento. Trabajé mis habilidades para lidiar con la ansiedad social que me causó abandonar los estudias hace meses. ¡Ahora de vuelta y haciéndolo bien! Estoy viviendo un periodo de transición y haciendo terapia durante la semana", ha escrito Amanda después de una etapa llena de altibajos.
Tras revelar sus planes en el mundo de la moda y el buen camino de su recuperación, ha confirmado que también su relación con Paul va viento en popa. Hace casi tres meses la que fuera estrella Disney sorprendía anunciando su compromiso cuando no se le conocía ninguna relación, pero tres semanas después sus sueños parecían truncarse y el propio Paul confirmaba a la revsita InTouch que habían roto, aunque mantenían una buena amistad. La ruptura, además de inesperada, resultó muy extraña puesto que la actriz no tardó en publicar una fotografía con su ¿ex? que titulaba "My love" (mi amor) que abría todos los interrogantes. Como respuesta a todos ellos, la pareja aseguró unos días después que estaban esperando su primer hijo, una noticia que, sin embargo, el abogado de Amanda negaba poco después.
La carrera cinematográfica de Amanda Bynes, de 34 años, se truncó tras ser diagonosticada de trastorno bipolar unido a una drogodependencia, que la acabaron llevando a un centro de desintoxicación. Tras este episodio, un juez decidió que sus padres fueran sus tutores legales hasta agosto de 2020. Este duro proceso de recuperación ha llevado a la joven a protagonizar más de una polémica, como cuando en 2013 comenzó a insultar a varias celebrities entre las que se encuentran Rihanna, Chrissy Teigen, Jay-Z y hasta el matrimonio Obama. A todos ellos les pedía perdón en el mismo vídeo en el que anunciaba su compromiso. "Entonces yo me sentía muy fea y era muy difícil expresarme", reconocía en la grabación mostrando su arrepentimiento.