Ya está recuperada de coronavirus, pero Maribel Verdú asegura que mantiene la prudencia. La actriz comenzó a encontrarse mal tras regresar de un festival en Bélgica, antes de que se declarase el estado de alarma en nuestro país. “Cuando llegué empecé con fiebre, estuve diez días que me afectó en todas partes” contó en El Hormiguero. Detalló que “fue llevadero”, aunque perdió el gusto y el olfato, síntomas del virus, durante ocho días. Aunque ya está recuperada, prefiere ser cauta debido a todo lo que aún se desconoce de esta dolencia. “Ahora teóricamente no puedo contagiar ni que me lo contagien, pero hay que ser cautos” explicó.
La vuelta al trabajo
A finales del próximo mes de junio está previsto que se reinicie el rodaje de Ana, una nueva serie que la tiene emocionada. “El 29 de junio empezamos a rodar. Ana es el mayor reto de toda mi carrera. Estoy muerta de miedo e ilusionada”. En esta ficción, que supone su vuelta a televisión 17 años después de Código fuego -el año pasado estrenó también una serie para Netflix, No te puedes esconder-, interpreta a una abogada que sufre problemas de ansiedad. Los rodajes, según contó, van a adaptarse a las medidas de seguridad recomendadas por las autoridades sanitarias. “Van a reestructurar secuencias y guiones para adaptarnos a los tiempos que vivimos”.
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Ha hecho todo tipo de cosas en la cuarentena, como explicó a Pablo Motos. “He escrito un diario de confinamiento desde el primer día, con lo que hago, lo que reflexiono. Leo, veo películas, hago cosas de casa, coloreo mandalas, con música clásica y voy estudiando guiones” aseguró. Ha incorporado además el ejercicio a su rutina pues considera que es importante cuidarse. “Entreno media hora todos los días porque voy a cumplir 50 y hay que mantenerse”. Recientemente participó en el rodaje de El faro de las orcas, una cinta que tiene localizaciones en la Patagonia argentina, donde también estuvo muy aislada. “Rodando la película estuve dos meses perdida sin internet y estuve muy feliz. Tranquila conmigo misma. Descubrí que tenía mucha vida interior y una mente activa” apuntó.
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