La noche fue especial en Operación Triunfo. El talent musical por excelencia se encontraba ante una situación histórica, ya que retomaron las galas tras un parón de casi dos meses, donde los alumnos permanecieron confinados en sus respectivas casa. Por desgracia, uno de ellos tenía que abandonar el concurso una semana después de volver a la Academia. Hugo y Gèrard eran los elegidos para disputarse el duelo final, e incluso habían disfrutado de una semana sin expulsión. Pero llegó la hora, uno se tenía que marchar. Ambos hicieron un brillante show, propio de una cita tan destacada. Hugo estuvo prácticamente perfecto con su versión de MMM Yeah. Toda la presión fue a parar al ceutí, que defendió Pillowtalk con un alto nivel que no pudo mostrar a lo largo del concurso, debido a sus altibajos. "Por fin nos has dado gran parte de lo que tienes dentro. Has estado soberbio", sentenció Javier Llano. El jurado destacó la evolución del aspirante: "Antes del cierre de la Academia ya apuntaba a un Gèrard más sólido y maduro".
Gérard fue finalmente el expulsado de la noche en una reñida votación, que ganó Hugo con el 57% de votos a favor. Pero poco antes de conocerse quién de los dos abandonaba el concurso, OT sorprendió con un romántico momento. Anne, expulsada el pasado 24 de febrero, regresó al plató vacío de público (hubo vía virtual) para cantar Salté, su primera canción en el mercado. Pero no estuvo sola, ya que con una guitarra salió el ceutí para entonar una dulce versión. Roberto Leal le preguntó qué le querría decir a su pareja: "Que le quiero, pase lo que pase hoy es el mejor músico que he visto en mi vida". Gèrard no se quedó atrás declarando públicamente lo feliz que está. "Te amo, te quiero muchísimo. Es superespecial tocar contigo tu single, que tu gente lo vea", dijo, muy emocionado.
El joven se llevó el cariño tanto del público como de sus compañeros. En los dos meses que permaneció confinado hizo una de las interpretaciones más marchosas con su versión de La gozadera. Llegó el momento de seleccionar dos nuevos nominados, quedando Bruno y Flavio como propuestos.
Roberto Leal, protagonista de la gala
Mientras Nía, una de las grandes favoritas para llevarse el concurso, se encontraba en mitad de su actuación cantando Quimbara, Roberto Leal se lanzó a bailar con ella, siempre guardando la distancia social obligatoria, emulando a las actuaciones de Aitana en el 2017 o de Miki en el 2018. El presentador estuvo muy activo y protagonizó este divertido momento en la primera de las cinco galas que le quedan para terminar OT. El sevillano ha fichado por Atresmedia para suPasapalabra, aunque puso la condición de volver al final del concurso de TVE porque los aspirantes se lo merecían.