Tras tres meses de aventura en Honduras, los concursantes de Supervivientes 2020 cada vez están más cerca de la ansiada final. Sin embargo, los robinsones están al límite de sus fuerzas y un mínimo roce en la convivencia puede desatar un auténtico huracán, especialmente cuando la disputa se produce por el reparto de comida. La última gran discusión del reality ha estado protagonizada por Hugo Sierra y Jorge Pérez. Todo comenzó cuando el ex de Adara Molinero estaba repartiendo el pescado entre sus compañeros y no estaba conforme con el trozo que había elegido el guardia civil. La falta de alimento y la tensión que se masca en Cayo Paloma ha provocado que Jorge estalle ante el 'reproche' de su compañero, con el que ha tenido un fuerte enfrentamiento.
"Lo repartes tú, dices que está bien, te dejo el que te corresponde a ti y cuando cojo yo sí que pones pegas. Es que es inentendible… O yo, al menos, no lo entiendo", recriminaba el modelo al ganador de GH Revolution. "Cuando cojas el más pequeño lloverá", respondía Hugo Sierra, quien ha explicado frente a las cámaras el verdadero motivo de su enfado con la elección de Jorge. "Como había un trozo más grande y le correspondía a Barranco, él hizo el giro y se quedó con el más grande. La verdad que la policía no es tonta", ha sentenciado el uruguayo con retintín.
Hugo, que no ha comido más pescado, ha preferido degustar el arroz que le correspondía de manera solitaria debajo de un árbol, apartado del resto de robinsones, pero ha explicado que no es porque tenga ningún problema con el grupo. "El tema de comer solo no es que coma solo por nada. Yo como debajo del árbol porque es donde siempre he comido. Es un momento bonito de comer y mirar el gran paraíso que tenemos. No pasa nada", ha apuntado delante de la cámara.
Instantes después del tenso encontronazo entre Hugo Sierra y Jorge Pérez, Ana María Aldón ha reflexionado sobre lo que despierta la comida en los concursantes, quienes considera que se comportan como "animales" ante la falta de recursos. "Somos como animales con la comida. Es como una selva llena de leones, pero que yo soy la primera, no quiero decir que solo sean los demás. Y como meta la mano uno antes que otro... Ya se ha liado", revelaba la mujer de Ortega Cano, mientras que el resto de supervivientes la daban la razón.