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Paco González y Manolo Lama estaban presentando el programa de radio Tiempo de Juego como un día más, sin embargo, no sabían la gran sorpresa que les esperaba. "Está entrando en el estudio Pepe Domingo Castaño... ¡ha aparecido por sorpresa! No sabíamos que iba a venir", dijo González, que se quedó sin palabras al verle. El mítico presentador se reencontró con sus compañeros después de haber estado enfermo por coronavirus, tal y como él mismo ha contado. "No estoy todavía recuperado de la voz, pero de lo demás he dado negativo", dijo aliviado. El comunicador gallego, de 77 años, se encuentra muy bien físicamente y confesó que está deseando volver al trabajo lo más pronto que pueda, sin embargo, todavía le quedan unos días de recuperación en casa.
© Tiempo de JuegoEl presentador de la Cadena COPE ha confesado que esta enfermedad "es algo que no se puede explicar con palabras" y que, en su caso, le ha atacado a la garganta. "No tuve ni mucha fiebre ni problemas pulmonares, pero no quiero ni acordarme de lo mal que lo pasé", ha explicado en una entrevista que ha concedido este fin de semana al periódico El Mundo, en la que ha hablado con mucha sinceridad de todo lo que vivió: "No comes, no duermes, estás fuera de ti, tremendos dolores de cabeza, a veces fiebre, un cansancio increíble (...) Creí que no lo contaba". Pepe, que durante este tiempo ha estado acompañado en todo momento po Tere, "mi novia eterna" que hace que "todo sea más fácil", asegura que lo primero que va a hacer cuando pueda salir a la calle es sentarse en una terraza con su gente y pedir una cerveza bien fría, además de "darle gracias a la vida por permitirme superar lo que he superado".
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© Tiempo de JuegoApoyo incondicional de todos los oyentes
Durante estos días, Domingo Castaño también ha hablado con sus compañeros de radio MARCA para contar las sensaciones tan extrañas que tuvo: "Tienes la cabeza que te explota, no puedes dormir durante 4-5 noches. Estás permanentemente despierto creyéndote que te vas... Iba a comerme una manzana y no podía ni pelarla... No tenía fuerzas, cuando llegas a ese punto, dices, 'esto se acaba'... Fue muy, muy duro". Eso sí, ahora que ha pasado todo, se siente muy afortunado del cariño que ha recibido durante este tiempo, además de la cantidad de mensajes de apoyo que le han mandado. "A cuidarse ahora más que nunca, un abrazo", "Me alegro de que ya estés recuperado", "España es menos España cuando no se escucha su voz en la radio", "¡Grande, Pepe Domingo!", "Me encanta verle ahí. Me ha dado una gran alegría", "Nada puede con él", "¡Bravo!", "El Dios de la radio" o "Bienvenido de nuevo", son algunos de los cariñosos mensajes que le han mandado tras vuelta al programa.
