Ana Obregón y Alessandro Lequio están siendo un apoyo fundamental el uno para el otro en la etapa más dura de sus vidas. Juntos dieron este fin de semana el último adiós a su hijo Álex, que falleció el pasado miércoles tras más de dos años combatiendo el cáncer, y se mantienen unidos para tratar de sobrellevar el dolor. Esta mañana, el italiano llegaba a casa de la presentadora. Lo hacía en coche, con una expresión de profunda tristeza en el rostro y con la camiseta azul que ya se ha convertido en todo un símbolo del recuerdo a su hijo.
Ana Obregón y Alessandro Lequio, unidos en el dolor tras la muerte de su hijo
Se trata de la misma prenda con la que le despidió en Barcelona, cuando fueron al velatorio Sancho de Ávila acompañados de las dos hermanas de Ana, Amalia y Celia. Es también la misma con la que abandonó la ciudad condal rumbo a Madrid. Esta camiseta azul con un logo blanco en medio era una de las favoritas de Álex y le hemos visto con ella en varias ocasiones, la última el pasado mes de febrero. Además, de homenajearle de esta forma tan personal, su padre se puso también una gorra con la visera hacia atrás y una americana emulando el inconfundible y característico estilo de su hijo. Ya sin la gorra y la americana, Alessandro parece aferrarse a esta camiseta tan siginificativa y continúa llevándola siempre que tiene la ocasión.
Tanto Alessandro como Ana han pasado un fin de semana muy intenso y complicado. Tras dejar el apartamento de Barcelona, donde han pasado las últimas semanas mientras su hijo permanecía ingresado en el Hospital Quirón de la capital catalana, pudieron descansar cada uno en su casa y, en el caso de Lequio, reecontrarse con su mujer María Palacios y su hija Ginevra Ena. El sábado llegaban juntos al entierro de Álex que tuvo lugar en el Cementerio madrileño de La Paz, donde pudieron darle el último adiós arropados por la esposa de Alessandro, Carolina Monje, la novia de Álex, las hermanas de Ana, Amalia y Celia García Obregón, su sobrina, Celia Vega-Penichet, y el socio del joven en su empresa Polar Marketing, Nacho Fernández-Ansorena.
"Te sacaré del peligro, pero mientras tanto recuerda que eres y siempre serás mi luz y mi centro. Es el mayor honor ser tu padre. Dios te bendiga Álex". Con estas emocionantes palabras, Alessandro se despedía de su hijo tras su fallecimiento. Padre e hijo mantenían una gran conexión eran muchas las cosas que Álex aseguraba haber heredado de su padre, entre ellas “constancia y esfuerzo”, y eran precisamente las palabras que le dedicaba, la mejor definición de esa entrega y amor que les unía. Ana Obregón también quiso compartir cómo se sentía tras el trágico final y lo hizo con una dura frase que condensaba el dolor que está atravesando: "Se apagó mi vida".