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El nuevo reparto de tareas que Supervivientes 2020 realizó el pasado jueves 23 de abril ha producido alguno de los momentos más dispares de la edición. En un principio a José Antonio Avilés no le hizo ninguna gracia tener que cuidar del fuego, pero parece que le ha cogido gusto y ahora se ha convertido en su guardián. Aunque sus compañeros no le creían capaz de cuidarlo y pensaban que se le iba a apagar continuamente, el colaborador de Viva la vida ha demostrado que, a pesar de "sus formas" para hacerlo, es totalmente competente para llevar a cabo este trabajo tan paciente. "Necesitas dormir, duérmete y deja el fuego hecho, así descansas un poco", expresaba Ivana a su compañero para que se relajara. "La verdad que sí, le pongo un tronco gordo y seguro que aguanta. Mira lo que ha aguantado todo el día", respondía él convencido.
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La salvación de José Antonio Avilés en su semana más dura
Tras unos minutos pensativo, el periodista se disponía a dejarlo todo preparado y le comentaba a sus compañeros cómo iba a hacerlo: "Como el aire viene de allí, lo he puesto de pared. ¿Sabéis lo que os quiero decir o no?", preguntaba mientras colocaba el tronco. Así, el colaborador atizaba con un palo al fuego para que hiciera ascuas y gritaba bromeando, "¡qué agobio!". Sus palabras hacían reír a sus 'amigas' Rocío Flores y Ana María Aldón, pero la felicidad duraba poco cuando el humo que estaba provocando el fuego hecho por el superviviente llegaba a la zona donde estaban durmiendo todos. "Lo que faltaba. Mira el humo que hay aquí ya", expresaba enfadado Albert Barranco. Como la argentina tampoco entendía cómo había logrado que les llegara la humareda, no dudaba tampoco en expresar su descontento: "Eso, lo que nos faltaba ahora es asfixiarnos a todos. Encima de que estamos empachados, asfíxianos y ya está", comentaba mientra la mujer de Ortega Cano tenía un ataque de risa.
No es la primera vez que la exconcursante de Grande Fratello discute con Avilés por el fuego. Aunque esta vez se lo tomó un poco a broma, la semana pasada no dudaba en enfrentarse a él por cocinar por la noche y no dejarle dormir. "Ivana, yo te digo que estamos en una playa de 40 metros cuadrados y que todos hacemos cosas. Disculpa si te he molestado...", expresaba el periodista. Parece que la tarea del fuego no es algo que se le de bien a todo el mundo. Barranco, que ha sido elegido como el mejor para hacerlo, tuvo que enseñar al colaborador durante la semana anterior. Al principio discutieron varias veces por las maneras en las que el cordobés hacía las cosas, pero finalmente ha acabado felicitándole por sus buenas labores. "La verdad es que no me lo esperaba para nada. Aunque no me hayas hecho caso en nada, ¡enhorabuena!", comentaba el catalán.