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Con el paso de las semanas en Honduras los robinsones están cada vez más cansados, pero también más capacitados para la supervivencia. El fuego es uno de los bienes más preciados en Supervivientes y, mientras el grupo de los 'siervos' ha intentado hacerlo una y otra vez para poder preparar una comida caliente, los 'mortales' han podido disfrutar de una cena contundente y, sobre todo, muy picante: arroz con jalapeños. Un plato que no ha sido del agrado de algunos de los miembros del equipo, como Rocío Flores, que decidía saltarse la cena. Sin embargo, esta no ha sido la última comida del día para algunos concursantes. Albert Barranco y José Antonio Avilés han continuado en la 'cocina' y esto ha enfurecido a Ivana Icardi.
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Con la caída del sol, el colaborador de Viva la vida encontró un nido de cangrejos y no dudó en capturarlos ayudándose de la linterna. "¡Barranco, qué nido de cangrejos hay detrás!", decía eufórico el periodista mientras se acercaba a su compañero con el suculento hallazgo. "Échalos a la olla", le sugería el extronista de MyHyV. Al lado de los robinsones que estaban cocinando los crustáceos se encontraban Rocío Flores e Ivana Icardi tratando de dormir, mientras sus compañeros aún estaban plenamente activos. Sin embargo, mientras la hija de Antonio David Flores no parecía inmutarse por la presencia de José Antonio y Barranco, la exparticipante de Grande Fratello comenzó a quejarse del ruido que estaban haciendo.
"Entre el foquito y los ruidos, de verdad, les juro que no se puede dormir", decía Ivana, visiblemente molesta. Albert Barranco pidió perdón rápidamente a la argentina, que siguió mostrando su malestar. "Me estás dando con el foco en toda la cara", reprochaba a José Antonio Avilés, quien también se disculpó. "Que no es pedir perdón, tío, que parecemos...", continuó la novia de Hugo Sierra, que pedía más respeto a los concursantes. "Ya cariño, pero es que no todos nos vamos a dormir a la misma hora (…) Yo no he gritado en ningún momento. También tenéis que entender que no todos nos vamos a dormir a la hora de los ingleses”, respondía el colaborador, que comenzaba a estar molesto por los reproches de Ivana.
Mientras la ex de Gianmarco Onestini insistía en que ella únicamente quería dormir, el periodista pedía que entendiera que los demás podían hacer otras actividades. "Ivana, yo te digo que estamos en una playa de 40 metros cuadrados y que todos hacemos cosas. Disculpa si te he molestado...", le decía José Antonio, en un tono conciliador. Sin embargo, Ivana parecía no querer dar su brazo a torcer y continuó discutiendo con su compañero. Después de más de dos meses de reality, el hambre y la falta de horas de sueño cada vez hacen más mella en el carácter de los supervivientes.