Rocío Flores afronta la recta final de Supervivientes con un claro pensamiento: ser ella misma y evitar a toda costa nuevos enfrentamientos. Así lo decidió tras su abrupto cara a cara con Yiya, que acabó con su enemiga nominada por decisión disciplinaria. Con José Antonio Avilés, de momento, como su principal aliado, la nieta de Rocío Jurado ha sacado a relucir otra de sus cualidades, la de saber entrevistar. La joven se ha convertido por un día en periodista, improvisando una entrevista a Elena Rodríguez, con la que mantiene una cordial relación. "Si te tuvieras que mudar a otra ciudad donde te irías", tanteaba Rocío, mientras su compañera no se mostraba muy decida: "Vivir... A mí el norte me encanta". "Si tuvieras que hacer una vida nueva...", insistía de nuevo la joven, puesto que la madre de Adara ha llevado con discreción su noviazgo con Pedro Solà. "Él me lo ha dicho muchas veces, que vivamos juntos", ha contestado, sin poder disimular una sonrisa en su rostro.
En ese momento, José Antonio Avilés ha interrumpido la conversación, queriendo aportar un dato. "¿Te molesta que te quite el sitio de periodista o qué?", le ha contestado en tono de broma su amiga, mientras el colaborador de Viva la vida negara que le importara en absoluto. Rocío Flores se ha interesado en la vida personal de Elena. "¿Por qué no vives con él?", preguntaba, mientras que su compañera no se mostraba muy cómoda con la charla. "Por miedo a otro fracaso", ha dicho. La hija de Antonio David Flores ha querido animarla a que viva su noviazgo sin dudas: "Sabes que si nunca lo intentas siempre vas a pensar en que es un fracaso".
"Pues no se te da mal lo de entrevistar, eh", se reía Elena Rodríguez, que ha contado más de su vida personal en una sola conversación con su compañera que en el resto de concurso. "Que va, si yo te pregunto en plan por conocer un poco más a la persona", ha dicho Rocío Flores, sin poder contener una sonrisa pícara.
El final de la conversación ha sido del todo inesperado. Un mosquito sobrevolaba la escena, posándose en cada uno de los protagonistas. En un instante, lo ha hecho sobre la frente de Elena. Sin pensárselo dos veces, Rocío ha golpeado con una palma el rostro de su compañera. ¿El resultado? El mosquito ha permanecido volando y la joven se ha tenido que disculpar entre risas con la madre de Adara. Una divertida anécdota que podrán contar sobre su etapa en Supervivientes.