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Los compromisos deportivos de Cristiano Ronaldo no le dejan en muchas ocasiones pasar algunas fechas señaladas al lado de su familia. Por eso ahora que la competición se ha pausado a causa de la crisis sanitaria mundial, el futbolista valora aún más si cabe cada momento que está cerca de los suyos. Por ejemplo, este domingo ha podido disfrutar de una comida íntima en la mejor compañía: su pareja, Georgina Rodríguez, y sus cuatro hijos, Cris Jr, Eva, Mateo y Alana Martina. Los seis han compartido mesa, conversación, diversión y complicidad, ingredientes que hacen perfecto a cualquier menú. "Deseamos una feliz Pascua a todo el mundo", ha dicho el futbolista junto a una foto en la que las pequeñas de la casa, sentadas en sus tronas y vestidas de manera idéntica -sudadera rosa y pantalón con animal print-, miran atentamente a su mamá mientras toman como postre un yogur bebible. Una imagen que también ha compartido la modelo junto a un gran corazón.
Los niños son los grandes protagonistas de la casa y en torno a ellos gira la rutina que siguen, en la que Cristiano y Georgina han incluido un divertido ritual por el cual Eva, Mateo y Alana Martina se divierten lavándose las manos. Ahora las autoridades recomiendan no salir a pasear por el parque, montar en bici o ir a dar de comer a los caballos -actividades que hacen normalmente en Italia, donde tienen fijada su residencia-, pero lo cierto es que no se aburren durante el confinamiento que pasan en Portugal, país natal del deportista. Comparten juegos con los pequeños, cantan y bailan a su lado y se muestran encantados con las ocurrencias y travesuras con las que les sorprenden y les hacen reír a diario. Además, la pareja aprovecha también algún rato para mantenerse en forma y seguir con sus entrenamientos.
© cristianoMuy pendientes de sus pequeños
La modelo y el futbolista llevan casi cuatro años juntos y están encantados con sus hijos, a los que educan en valores porque no quieren que vivan ajenos a la realidad. "Tenemos una vida privilegiada, pero venimos de familias humildes. Hemos trabajado muy duro para conseguir lo que tenemos y esa es la enseñanza que queremos transmitir a nuestros hijos", aseguraba Georgina en una entrevista en Grazia. “Les hemos enseñado a no dar nada por descontado, deben ser humildes y no perder el contacto con la realidad. El sacrificio, la disciplina, el sentido de responsabilidad, los sueños, la perseverancia y la gratitud son valores que queremos transmitirles cada día”, añadía la jacetense.
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"Lo primero que hago nada más levantarme es mirar a mis hijos en sus camitas. Ver cómo se despiertan, cambiarles, ayudarles con el aseo y desayunar en familia. Les suelo dedicar toda la mañana, jugamos juntos y les ayudo a crecer... Les sirvo la comida y descansan. Después nos tomamos un descanso para dedicar un rato al gimnasio, a los entrenamientos y, a veces, al spa. Me gusta hacer la compra para mis hijos y buscar cuáles son los alimentos más sanos para todos. Y antes de dormir nos gusta ver documentales", contaba Gio, como la llaman cariñosamente sus allegados, en ¡HOLA! acerca de cómo es el día a día en su hogar.
© © nicolasgerardinLa recuperación de Dolores Aveiro
Estar pasando este confinamiento en Madeira permite a Georgina y Cristiano vivir de cerca la evolución de la madre del futbolista, Dolores Aveiro, que se recupera de un derrame cerebral. "Han sido días duros, de luchas y victorias, pero ya estoy en mi casita rodeada del amor de mi familia, que es mi fuerza, y de buena energía", decía al regresar a casa después de casi tres semanas ingresada en el Hospital Doctor Nelio de Mendonça. "Tengo la suerte de vivir para amar a mi familia y tenerlos cerca de mí. He vuelto con paz en mi corazón y pensando que por qué juzgar el color de la piel, la ropa que llevas o el aspecto de cada uno. No somos nada frente a la vida, somos simples peatones en el mundo. La vida es una lección, tenemos que estar agradecidos por todo y tener fe en Dios para que todo salga bien", escribía emocionada.
