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Además de hacer fuego, recoger caracolas, pescar y discutir, en la isla también hay tiempo para pasarlo bien y divertirse. Aunque José Antonio Avilés y Rocío Flores terminaron esta semana pasada enfadados y ella aseguró que "no quería saber nada" de su compañero, ambos supervivientes han olvidado sus diferencias y se han puesto a dar clases de twerking al resto de habitantes de Playa Prohibida. El primero en intentarlo ha sido el colaborador de Viva la vida y sus movimientos no han sido todo lo correctos que deberían. Tras ver cómo lo hacía, la nieta de Rocío Jurado se ha puesto manos a la obra y ha demostrado cómo se hace realmente. Todos se han quedado atónitos con sus movimientos mientras se apoyaba en una de las cajas de madera de la organización y continuaba con estos pases de baile tan atrevidos.
© Telecinco"Venga, hazlo que a mí no me sale", pedía Avilés a su compañera. Una vez le enseñaba cómo hacerlo, Jorge y Elena no podían creer lo que estaban viendo. "Con todos ustedes, la nieta de Rocío Jurado haciendo twerking", anunciaba el superviviente muy alegre. "¡Como me ponga a hacerlo yo ahora, madre mía, veréis lo que es!", expresaba Fani. "A ver, que yo no lo sé hacer", respondía de nuevo Rocío. "Pues a mí se me da genial", revelaba la exconcursante de La isla de las tentaciones. Pese a su afirmación, la novia de Christofer se quedaba pelando almendras junto con Ferre, quien cantaba una canción para animar a sus compañeros de reality.
© TelecincoUna vez terminados los bailes, ambos supervivientes han ido con Barranco y Jorge a pescar. Aunque lo han intentado, han tenido tiempo también para divertirse mientras lo hacían. Se han puesto a nadar a braza imitando el movimiento de dos señoras mayores y han empezado a bromear: "Vamos Rocío que dentro de un ratito nos vamos a echar unos bailes al hotel, que tenemos baile esta noche", relataba Avilés. Ella no paraba de reírse a carcajadas y él añadía: "No me digáis que no parecemos dos jubiladas del Imserso en Benidorm. Faltan los hidropedales". "Ay, que me ahogo", decía entre risas la hija de Antonio David Flores. No sabemos si la paz entre los dos durará mucho o si empezarán a discutir de nuevo, pero parece que ambos supervivientes han enterrado el hacha de guerra y han comenzado a llevarse bien otra vez.
