Isabel Preysler está atravesando un duro trance. No solo ha perdido a su segundo marido y buen amigo, sino que es testigo de la tristeza y desolación de su hija Tamara. El fallecimiento de Carlos Falcó, a los 83 años, tras varios días luchando contra el coronavirus en la UCI del hospital madrileño Fundación Jiménez Díaz, ha causado un gran impacto en sus seres queridos y amigos. Desde su casa, donde se encuentra en confinamiento, Isabel conversa telefónicamente con la revista ¡HOLA! y se sincera sobre cómo se encuentra tras el trágico final y cómo era la relación con el padre de su cuarta hija.
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“Era un hombre bueno, buen padre, buen amigo”, cuenta sobre el que fue su marido entre 1980 y 1985. Sumida en una gran tristeza, la madre de Tamara Falcó solo tiene buenas palabras para el marqués de Griñón. En las páginas de la revista ¡HOLA!, ya disponible en tu quiosco habitual, podrás leer al completo el emotivo recuerdo que le dedica su exmujer. Preysler y Carlos Falcó se conocieron en 1978, en un pase privado que la embajada norteamericana organizó de la película Fiebre del sábado noche. El marqués ya se había divorciado de Jeannine Girod e Isabel estaba a punto de separarse de Julio Iglesias.
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Según relata su madre en las páginas de la revista ¡HOLA!, Tamara aún se encuentra muy triste después de cumplir, junto a sus hermanos, con la última voluntad de su padre. Cinco días después de perder a su padre, rindió un sentido homenaje a su memoria, compartiendo una fotografía del marqués con sus cinco hijos junto a un emotivo mensaje: “Fue un idealista, bueno y generoso con sus hijos y amigos y estará siempre vivo en nuestra memoria”, escribía en un texto en el que también destacaba su gran labor como empresario, un tributo al que también se unió su hermano Enrique Iglesias, que contaba con cinco años cuando su madre se casó con el marqués.