Numerosos sectores se están viendo golpeados por el avance del coronavirus y no son pocos los casos en los que se ha cesado toda actividad. La cultura y el deporte son dos de los ámbitos que están frenando sus compromisos para evitar concentraciones de personas. El último equipo en hacerlo ha sido el Real Madrid de baloncesto después de confirmar el positivo de uno de los jugadores de su equipo, Trey Thompkins, que formó parte de la expedición del Madrid que viajó el 3 de marzo a Milán, para disputar a puerta cerrada el encuentro ante al Armani. También el equipo de fútbol se ha visto obligado a lo mismo, después de jugar en la Europa League contra el Olimpiacos (su presidente ha dado positivo).
Los deportistas han tenido que ponerse en cuarentena y recluirse en casa, una situación que la mujer de Rudy Fernández, Helen Lindes, ha compartido con sus seguidores. “Los últimos días los he vivido como si estuviera viendo una película apocalíptica. Casi sin poder realmente asimilar que esto no es ficción sino una terrible realidad” comenzaba, manifestando el asombro que siente gran parte de la población. Cuenta entonces cómo afrontan la cuarentena que tiene que guardar. “A nosotros también nos ha tocado quedarnos en casa, por precaución, las próximas semanas. Se aproximan días intensos donde habrá que sacar el ingenio para entretener a los niños, no alarmarse y aprender a desconectar”.
Recalca que todos se encuentran bien y envía un mensaje de solidaridad, pidiendo conciencia social para frenar la pandemia. “Por fortuna estamos todos bien pero lo que más miedo nos da son las repercusiones que tendrá en la sociedad esta pandemia. Ojalá sea sólo cuestión de semanas y dentro de poco podamos todos volver a la normalidad. Está en nuestras manos que consigamos controlarla así que, por favor, tomemos las precauciones adecuadas para prevenir el contagio”.
Helen tendrá que estar en casa acompañada por su marido Rudy Fernández y sus hijos, Alan, de tres años, y Aura, de diez meses. Hace precisamente unos días compartía una preciosa imagen de la pequeña, confesando lo encantada que está con su bebé.