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Andrés Iniesta y Anna Ortiz sufrieron un duro golpé el 7 de marzo de 2014. Aquel día, sus vidas se pararon en seco cuando la mujer del futbolista perdió al bebé que esperaba a los ocho meses de gestación. Ahora, seis años después, el matrimonio ha reunido las fuerzas necesarias para hablar públicamente de esta triste pérdida. "Hoy me siento fuerte para hablar de ti y para ti. De cuánto nos enseñaste durante esos ocho meses. Ocho meses de amor incondicional, de esperanza e ilusión, pero también de miedos e incertidumbre. Junto a ti aprendimos que el camino nunca es fácil y que merece la pena todo el esfuerzo; aunque la tormenta cayera aquel 7 de marzo de 2014", ha comenzado diciendo Anna Ortiz junto a una foto de una estrella.
© Gtresonline"Hoy sé que tu camino aquí, con nosotros, debía ser ese. Y me siento aliviada y feliz por ello. A papá y mamá nos hiciste indestructibles y nos uniste más, gracias al inmenso amor que desprendes. Nos enseñaste lo que significa VIDA, a valorarla y disfrutar de ella. Descubrimos que el sol vuelve a brillar con la llegada de Paolo Andrea, Siena y Romeo. Hoy y cada día te doy las gracias por cuidarnos, porque así lo siento. Papá, mamá, Valeria, Paolo Andrea, Siena y Romeo. Para ti... nuestra estrella ? Te queremos", ha finalizado.
© annaortiz34El matrimonio esperaba ilusión la llegada del que iba a ser su segundo hijo tras la llegada de Valeria el 4 de abril de 2011. "Nos hace mucha ilusión poder compartir con todos vosotros la feliz noticia de que Anna está embarazada. Valeria tendrá un hermanito", anunciaron felices en octubre de 2013. Sin embargo, meses después se confirmaba la peor de las noticias. Afortunadamente, la pareja logró sobreponerse y formar una gran familia con la llegada de Paolo Andrea en mayo de 2015, Siena, en mayo de 2017, y Romeo, nacido en junio del año pasado.
© Getty ImagesAndrés y Anna se conocieron un 5 de octubre de 2007 y el 8 de julio de 2012 se dieron el 'sí, quiero' en una idílica boda celebrada a orillas del mar. Tras despedirse del Barça, el jugador fichó por el Vissel Kobe y se instaló con su familia en Japón.
