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La cantante Duffy lo tenía todo para triunfar. Escocesa de nacimiento, su presencia en los medios se limitaba a lo estrictamente musical: una voz dulce unida a un aspecto aniñado son los matices que consiguieron popularizar Mercy. Su carrera fue breve y comenzó, como la de muchos nuevos talentos, en un programa de televisión: Wawffactor, en el que un segundo puesto no le impidió demostrar que su lugar estaba en un estudio de grabación. Su disco debut, Rockferry, superó al de Amy Winehouse (ambas cantaban el mismo estilo musical) colocándose en el cuarto puesto de la lista de ventas estadounidenses. Muchos aseguraban que el trono del soul sería suyo. Sin embargo, de un día para otro, desapareció del mapa. Ahora, después de una década de silencio, la artista revela toda la verdad de su sonada ausencia.
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"No puedo imaginar la cantidad de veces que he pensado en escribir esto. La forma en la que lo haría o cómo me sentiría después. Bueno, no estoy completamente segura de por qué ahora es el momento adecuado, y qué es lo que hace que me sienta emocionada y liberada al hablar. No puedo explicarlo", comienza en sus redes sociales la cantante. "Muchos de vosotros os habéis preguntado qué me pasó, dónde me metí y por qué. Un periodista contactó conmigo para preguntármelo, encontró la manera de localizarme y le conté todo el verano pasado. Fue amable y me sentí increíblemente bien al explicárselo. La verdad es que, creedme, ahora estoy bien. Pero fui violada, drogada y secuestrada durante varios días. Es evidente que sobreviví, pero recuperarme de aquello me ha llevado tiempo. No hay una manera amable de explicarlo", continúa.
"Puedo deciros que, después de los miles y miles de días que me comprometí a querer sentir la luz del sol en mi corazón de nuevo, ahora por fin lo hago. Y si os preguntáis por qué no elegí usar mi voz para expresar mi dolor en ese momento es porque no quería mostrarle al mundo la tristeza de mis ojos. Me pregunté, ¿cómo iba a ser capaz de cantar desde lo más profundo de mi corazón si estaba roto?", relata la cantante en su texto.
En las próximas semanas se publicará una entrevista hablada en la que la artista propone responder preguntas que la gente quiera saber. "Me gustaría responderlas, si puedo. Aprecio por vuestra amabilidad a lo largo de los años. Habéis sido mis amigos y quiero daros las gracias por eso", comenta Duffy. Pero antes de terminar, la cantante quiere que esta experiencia sea positiva para ella, por lo que también pide respeto para sí misma y privacidad para su familia.