Unas imágenes en blanco y negro de doña Lola, la madre de Paz Padilla, marcaban uno de los inicios de Sálvame más triste que se recuerdan. Diez días después del fallecimiento de su gran apoyo en la vida, la presentadora la retomado su trabajo en una jornada cargada de emoción. Con lágrimas en los ojos, lo primero que ha querido hacer es agradecer los cariños: "Buenas tardes, bienvenidos. Quiero dar las gracias a todos los que han estado conmigo y a los que han estado con ella. A mis jefes de Telecinco, a mis compañeros, a mis compañeros de La que se avecina. A todos ustedes que me mandasteis mensajes por Instagram. No pude contestaros". "Estaba pasando por unos de los momentos más duros de mi vida. Me emociono porque es mi madre. Muchos me decíais que era mayor, pero cuando se va una madre, se te rompe el alma", sentenciaba ante el absoluto silencio del plató.
"Estoy fuerte. Ella me enseñó que la felicidad es gratis. Ella quiso vivir hasta el último instante... Decía: 'Tiene guasa, tener que irse con lo bien que se está aquí'", continuaba sus palabras la conductora del programa, con los sentimientos a flor de piel. "El amor de la familia está por encima de todo. Mi mamá siempre va a estar porque su esencia sigue viva. Te he despedido de forma muy alegre, fue un día precioso. Suena raro, pero lo fue. Aquí estamos tus hijos con ganas de vivir. Te recordaré siempre. Te quiero muchísimo, mamá. Nos reencontraremos algún día", ha finalizado Paz Padilla, antes de dar el último regalo a su madre: "Tú amabas este programa y por eso te lo quiero dedicar". Doña Lola, como la llamaban en los platós, falleció el pasado 11 de febrero en su Cádiz. Siempre se mostró orgullosa de su hija, llegando a conectar en directo con el programa de Telecinco cuando su Paz fue designada para dar las campanadas del 2019.
Horas antes de ponerse al frente del programa, Paz Padilla compartía con sus seguidores una publicación para homenajear a su madre. "El Sálvame de hoy se lo quiero dedicar a ella, por lo mucho que disfrutaba cada tarde viéndolo, y porque muchas veces he trabajado pensando en lo feliz y orgullosa que estaba de mí, siempre me apoyó en mi carrera, en la tele, en el teatro", comenzaba su precioso texto la humorista. La imagen que acompañaba a sus palabras era de su madre viéndola en el escenario.
"Recuerdo como lloraba cuando me fui a Madrid por primera vez, sufriendo por que su niña 'la pequeña' abandonaba el nido para ser artista, por el miedo a que volviera como un muñeco roto", remoraba la actriz en el post donde sus seguidores también le han dado el último adiós a su madre. Por último recitaba su canción favorita, la de Romance del curro 'El Palmo' de Joan Manuel Serrat.