Han pasado ya tres semanas desde el fallecimiento de Kobe Bryant y su hija Gianna en un accidente de helicóptero, pero en su familia siguen intentando asimilar esta inesperada pérdida y acostumbrarse a su nueva realidad. Vanessa Bryant pone todo de su parte para sacar fuerzas de flaqueza y poder continuar con su rutina al lado sus tres niñas, Natalia, Bianca y Capri, su motor para sobre llevar esta situación y seguir adelante. Sin embargo, el recuerdo de sus seres queridos sigue estando muy presente especialmente ahora que se ha celebrado el día de los enamorados. La viuda de la leyenda del baloncesto ha asegurado que esta era la festividad favorita de su marido, al que ha recordado con una romántica foto de ambos acompañada de la letra deTell Him, canción de Lauryn Hill.
"Por mi eterno Valentín, te quiero mucho. Te extraño mucho en tu fiesta favorita. Te amo por siempre. Besos para ti y Gigi en el cielo. Feliz día de San Valentín, mis bebés. Con todo mi amor, tu boo-boo", ha dicho Vanessa, quien en los últimos días no solo ha rendido homenaje a su marido y su hija cambiando el nombre de la fundación del jugador, la Mamba Sport Foundation, por Mamba & Mambacita Sports Foundation. Además, también ha expresado abiertamente sus sentimientos con la finalidad de poner palabras a su dolor y ayudar a otras personas que estén atravesando un momento similar. "He sido reacia a expresar mis sentimientos con palabras. Mi cerebro se niega a aceptar que tanto Kobe como Gigi se han ido. No puedo procesar ambos al mismo tiempo. Sé que lo que siento es normal, es parte del proceso de duelo, sólo quería compartirlo por si alguien por aquí está atravesando la misma situación", aseguraba la modelo, que ha compartido dos décadas de amor con el jugador de los Los Angeles Lakers.
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Días atrás, la familia Bryant se despedía de Kobe y Gianna en la más estricta intimidad. Padre e hija eran enterrados en una ceremonia privada celebrada en Corona del Mar, en California, el 7 de febrero, tal y como confirmaban los certificados de defunción que salieron a la luz esta semana. "Vanessa y el resto de la familia quería una ceremonia privada para llorar su muerte", aseguraba una fuente cercana al medio estadounidense Entertainment Tonight. "Ha sido extremadamente duro para todos y sigue siendo difícil para ellos el procesar que han perdido a estas dos hermosas almas", añadía.
Será el próximo 24 de febrero (número que coincide con los dorsales de Kobe y su hija, 24 y 2, respectivamente) cuando se celebre su despedida pública, un adiós que acogerá el Staples Center, estadio en el que Kobe vivió tantas tardes de gloria y al que seguía acudiendo con la pequeña Gianna para apoyar al equipo de sus amores, Los Lakers. Como el aforo del recinto está limitado a 20.000 personas, el próximo miércoles saldrán a la venta unas entradas para todos aquellos seguidores que quieran recordar al jugador y su hija. Tal y como adelanta TMZ, en tan solo cinco horas ya había más de 88.000 personas interesadas en asistir, aunque no todos podrán cumplir su deseo de estar presentes en este momento tan importante para todos aquellos que admiraban al jugador, considerado una auténtica leyenda.