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La mesa de actualidad de El Programa de Ana Rosa suele poner diferentes temas para que los distintos colaboradores den su opinión. En el caso de este martes, se ha hablado de las clínicas turcas tan populares a la hora de realizar injertos de pelo. Sorprendentemente, y con gran sentido del humor, Joaquín Prat ha confesado: "Vengo como cliente satisfecho". Eso sí, el presentador de Cuatro al Día, que todavía colabora en el magacine de la mañana, ha puesto el foco en lugares poco recomendables: "Si entras en un cuchitril donde te vas a hacer una intervención estética tienes que desconfiar". Fue justo hace dos años cuando decidió someterse a este injerto de pelo, puesto que su pérdida se daba especialmente en las entradas.
© MediasetEl precio de estas prácticas en Turquía y otros países son mucho más económicas, pero en algunos casos lo barato acaba por salir caro. "En estos casos es tirar de sentido común. Yo no jugaría a ahorrarme mil o dos mil euros... Ahorras un poco más o pides un préstamo y vas donde sabes que te lo van a hacer bien", argumentaba Joaquín Prat, que decidió someterse a un injerto de pelo en el final del 2017. Debido a una apuesta (prometió adiós a sus rizos si se demostraba que Pilar Abel no era hija de Salvador Dalí) el presentador acabó por tener que raparse en directo. "Al principio no lo iba a decir, pero al ver el resultado tan alucinante, me he dicho que por qué no decirlo para que otros se animen", explicó en su momento. Poco tiempo después, el cambio en la caballera era evidente, puesto que él no era consciente de "las entradas que tenía".
Ana Rosa, por su parte, ha querido indagar con humor en los posibles efectos secundarios del tratamiento, incluyendo el apetito sexual. "En un porcentaje muy bajo, basta con dejar de tomarla y lo recuperas", contestó con elegancia el colaborador de la mesa de actualidad, que tiene tablas de sobra por su gran experiencia televisiva.
© MediasetJoaquín Prat vive en estos meses una época de cambios, puesto que ha comenzado su gran oportunidad en solitario. Desde finales de noviembre del 2019 el presentador está al frente de Cuatro al Día, sustituyendo a Carme Chaparro. "Mi padre siempre decía que, para que el público te quiera, primero tienes que quererte tú, y eso implica que, aunque tengas un mal día, no puedes decir 'no' a una persona que viene a pedirte una foto", decía en su primera intervención, dejando claro lo orgulloso que se sentía de su padre y de la responsabilidad que tenía frente a la audiencia. Desde entonces compagina este nuevo papel con el de colaborador con su querida Ana Rosa Quintana.
Ana Rosa Quintana tiene sentimientos encontrados sobre la marcha de Joaquín Prat en noviembre
