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Uno de los aspectos que parece llamar más la atención de la Super Bowl es el hecho de que los protagonistas de su show de medio tiempo no reciban nunca ninguna compensación económica por todo el trabajo realizado, ya que el presupuesto del espectáculo se destina única y exclusivamente a producción. Sin embargo, Jennifer López y Shakira han visto cómo el aumento de sus cifras los días posteriores al evento lo compensaba con creces. Algo que ocurre cada año, pero que, en esta ocasión, ellas han superado con creces. Las descargas y ventas en las discografías de ambas divas latinas se han disparado en, nada más y nada menos que, casi un 900%. Canciones como Waiting for tonight de JLo o Hips don’t lie de la colombiana vuelven a ser tendencia y aparecen en las listas de las más descargadas.
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Si alguien cuestionaba la rentabilidad de participar en el espectáculo de la Super Bowl, la cifra no deja espacio a las dudas, ya que, con un incremento de beneficios de un 893% los resultados hablan por sí solos. Observándolo de manera individual, Shakira ha llegado a alcanzar las 13.000 descargas diarias después de la Super Bowl, poniéndose en cabeza con algunos de sus clásicos como Waka Waka, además sus reproducciones vía streaming en plataformas como Spotify han subido un 230% en comparación con 2019. Por su parte, Jennifer López ha sonado un 335% más en dicha web de música, mientras que sus ventas han llegado a alcanzar la media de 8.000 descargas diarias gracias a hits como On the floor o Lets get loud. Una auténtica locura y unos resultados más que reseñables comparándolos con, por ejemplo, el aumento del 200% que consiguió Justin Timberlake tras su participación en la final de fútbol americano.
La Super Bowl no deja de dar alegrías a sus protagonistas de este 2020 más allá de los resultados. La propia JLo se emocionaba al ser ovacionada en el programa de Jimmy Fallon y al recordar cuánto trabajó mucha gente para hacer el show posible. Por su parte, Shakira, orgullosa de sus raíces, está inmersa en el propósito de expandir la champeta, un baile tradicional caribeño al que dio sus espacio de protagonismo en el show y que, ahora, ha convertido en viral gracias al #ChampetaChallenge.
Pero no solo las divas del pop latino han visto sus beneficios multiplicarse. Otra de las grandes protagonistas fue Demi Lovato, encargada de entonar el himno de Estados Unidos que inauguraba el evento. En su caso, las canciones de la ex chica Disney han crecido un 31% en cuanto a escuchas digitales. Algo que también se ve afectado por su impecable actuación en los Grammy, confirmando su total recuperación tras haber estado sometida a un proceso de desintoxicación.
Otros dos nombres de la música urbana se subieron al escenario de la final de la NFL. Los compañeros de Shakira y JLo también han visto crecer sus números, aunque no alcanzan las cifras de las protagonistas. Bad Bunny y J Balvin han aumentado sus escuchas en Spotify un 24% y un 16%, respectivamente. Además, ambos han anunciado nuevos proyectos musicales que seguro se verán beneficiados tras su aparición en la Super Bowl. Por si esto fuera poco, el puertorriqueño lanzó 6 Rings en honor a Kobe Bryant unos días antes del evento. Alianzas latinas que no terminan ahí, ya que, Jennifer López ha anunciado su adhesión uno de los grandes éxitos de la temporada, Ritmo, la colaboración entre J Balvin y The Black Eyed Peas en la que próximamente la del Bronx también formará parte.