Pedro J. Ramírez protagonizó esta imagen tan familiar en la segunda edición de los Premios Cocinillas. El director de El Español acudió acompañado por su mujer, Cruz Sánchez de Lara, y sus hijos, Tristán y Cósima Ramírez, nacidos durante su relación con la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada. Los cuatro posaron para los medios con la mejor de sus sonrisas, demostrando que se llevan de maravilla. "Teniendo un padre como el que tengo es imposible tener mala relación, nos unen tantas cosas, tantos proyectos... siempre hay que seguir adelante, no hay que quedarse en el pasado", declaró Cósima a Europa Press.
El periodista, por su parte, estaba feliz por tener a sus hijos cerca y también por contar, una vez más, con el apoyo de su pareja en una noche tan especial. "Cruz es una persona fantástica como compañera de viaje, como complice de cualquier aventura emocional e intelectual", reconoció. Unas palabras que sonrojaron a la abogada. "Recomiendo a todo el mundo que espere a que llegue el amor de su vida porque es mucho mejor que conformarse con otra cosa y luego tener que cambiar", respondió. "No hay que tener miedo a estar solo. Muchas veces la gente busca pareja por no estar solo y y no tener pareja no es estar solo y hay que enseñárselo a la gente joven", añadió.
Pedro J. Ramírez y Cruz Sánchez de Lara se conocieron en 2015 cuando él buscaba financiación para El Español, sin embargo, su relación de pareja no comenzó hasta un año después, según contó la abogada en Vanity Fair, cuando el periodista decidió separarse de Ágatha Ruiz de la Prada, la que había sido su pareja durante más de tres décadas. En 2017, se dieron el 'sí, quiero' ante notario y desde entonces no se han separado ni un solo instante. "Nos conquistamos por el cerebro y por las ganas de trabajar de los dos", aseguró anoche la letrada.
A sus 67 años, el periodista está atravesando una feliz etapa en la que cuenta con el apoyo de sus dos hijos, Tristán y Cósima, que también apoyan a su madre, con quien trabajan en su imperio de moda. Él hijo mayor de la expareja es consejero delegado y la benjamina responsable del departamento de relaciones internacionales, de ahí que no suelan perderse ningún desfile.