Desde octubre de 2018 María Teresa Campos no pisaba un plató de Mediaset, un extenso periodo de tiempo considerando la carrera profesional de la periodista, que ha colaborado con la cadena durante muchos años. Este fin de semana regresaba a televisión para asistir como invitada a Sábado Deluxe en un programa que se ha centrado en su ruptura con Edmundo Arrocet. Las palabras de bienvenida de Jorge Javier Vázquez eran sinceras: "¡Qué ilusión me hace!", comentaba el presentador al verla. "Más me hace a mí", contestaba ella muy emocionada.
Como era de esperar, y tras terminar su relación días antes de Navidad, la periodista no ha podido evitar emocionarse y con la voz entrecortada ha confesado a su compañero que "la vida te cambia, he querido hablar hoy aquí y contigo, porque quiero pedir tranquilidad, me hacen muchas preguntas y ya me está haciendo daño a la salud". Pido volver a la normalidad de mi vida. Yo ya no tengo relación con esta persona", rogaba ante las cámaras de televisión.
A pesar de sus palabras, María Teresa tenía ganas de aclarar su historia con Edmundo Arrocet con el objetivo de zanjarlo de una vez por todas. "Tenía miedo de que me diera una depresión, pero ya no me va a dar", confesaba sin poder controlar las lágrimas y mostrando una voz muy temblorosa. Y por eso mismo ha querido volver a pisar el plató del que fue su lugar de trabajo durante años.
El momento más duro de la noche ha sido cuando María Teresa Campos recordaba cómo Edmundo Arrocet se marchó para no volver. Cuenta que, en medio de una conversación, él le dio una mala contestación y ella se puso tan nerviosa que no recuerda exactamente las palabras que le estaba diciendo. Al día siguiente fue muy escueto: "Teresita, me voy…", y así fue. Días después recibió el famoso mensaje con el que cortaba la relación definitivamente. Ella se puso nerviosa y quería ir a buscarle a la estación del AVE porque quería que le dijera en persona lo que le había leído en su teléfono.
"Yo le puse un mensaje tremendo", reconoce, y añade que él le ha llegado a echar en cara esas duras palabras. Sin embargo, ella mantiene que no le faltaban motivos para hacerlo. Durante el trayecto hasta la estación del AVE reconoce que "estaba desesperada", y permaneció varios días llorando sin comprender cómo todo se había acabado de un día para otro.
Con el corazón en la mano y mucha emoción aseguraba haber estado "muy mal". "Solo quiero recuperar mi vida, ahora hay diferentes cosas que me ilusionan", recalcaba queriendo asegurar que son las claves de su recuperación. "Seguramente la peor cosa que me ha pasado en los últimos tiempos ha sido haber estado sin trabajar, verme que no tenía un motivo para levantarme, eso me ha afectado bastante", explicaba la madre de Terelu Campos.
'Una cosa es que se acabe Edmundo y otra cosa es que se acabe el mundo', María Teresa Campos en ¡HOLA!