A partir de esta semana, los lunes en Telecinco son de Vivir sin permiso, una de las ficciones más valoradas que tiene la cadena. Los nuevos capítulos de esta segunda temporada cierran esta historia que ha tenido en vilo a millones de espectadores. El empresario Nemo Bandeira (interpretado por José Coronado) vuelve en estos diez episodios que pondrán el broche de oro a la ficción. En su recta final, la serie ha comprimido sus tramas para que los fans puedan disfrutar de las historias "sin grasa ni relleno", comentaba Aitor Gabilondo, creador de la serie en la presentación. Más acción, flashbacks, traiciones y nuevos personajes son algunas de las claves de esta tanda de episodios.
Junto a Coronado, los actores Álex González, Pilar Castro, Claudia Traisac, Edgar Vittorino o Patrick Criado vuelven en una temporada que, según este último intérprete, “se supera”. Entre los nuevos fichajes se encuentra la actriz Marta Larralde, que llega con el objetivo de derrumbar a Nemo, pero de manera legal. Su personaje, honesto, inteligente y perspicaz, pondrá todas sus fuerzas en destruirlo de una vez por todas. En esta nueva y última tanda de capítulos todo va a explotar. (Spoiler de la primera temporada) Tras empujar a Mario por el acantilado, el personaje de Coronado se encuentra en la peor etapa de su vida: el alzhéimer avanza rápidamente. El ritmo de la ficción afectará al resto de personajes en cada capítulo y la tensión hará que muchos de ellos tomen decisiones que cambiarán sus vidas.
Muchos tienen la duda de si hay posibilidades de un spin off, pero los creadores de la serie lo tienen muy claro: "Es un final definitivo, el final del relato y termina para siempre", explicaba Arantxa Écija, directora de ficción de Telecinco. "Hay personajes que tienen posibles potenciales secuelas, pero es una historia cerrada y no entra en nuestros planes", añadía Manuel Villanueva, director general de contenidos.
Ha pasado más de un año desde la final de su primera temporada, coronada como la serie más vista de 2018 (tuvo una audiencia media de 2,7 millones de espectadores y un 19% de share). En 2020 planea también derribar todas las audiencias y volver a conseguir este título demostrando que las televisiones que emiten en abierto todavía pueden apostar por tener ficciones propias que compitan contra las de las plataformas. Su creador incide en que más allá de los debates sobre cómo deben ser las series, de su duración o si son en abierto o no, "tratan de contar historias para las personas, no para los algoritmos".