Hacía ocho meses que no veíamos a Kit Harington y Rose Leslie juntos. Concretamente la última vez fue en la première de la última temporada de Juego de Tronos en el mes de abril, cuando posaron juntos en la alfombra roja y se iba a cumplir un año de su romántico enlace escocés. Sin embargo, la pareja se ha enfrentando desde entonces a momentos más difíciles por los rumores de infidelidad por parte del actor, el final de la serie que les juntó y les lanzó a la fama y el ingreso del que interpretara en un centro de rehabilitación por sus problemas de salud.
Desde entonces sus apariciones públicas habían sido escasas y siempre por separado, centrados en sus carreras después del final de Juego de Tronos. Kit Harington ha pasado de una gran saga a otra al unirse al rodaje de Los Eternos con Angelina Jolie y Richard Madden mientras que su mujer rueda la película Death on the Nile con Gal Gadot y Armie Hammer.
Sin embargo, han sacado tiempo de sus ocupadas agendas para acudir a un evento benéfico en la iglesia londinense de St. Botolph's without Bishopsgate. Se trataba de una misa navideña con villancicos para recaudar fondos contra la esclerosis múltiple en la que tanto Kit como Leslie se subirían al altar para leer algunos fragmentos. El precio de la entrada general era de 40 libras (47,5 euros) e incluía una tartaleta de frutas y un vino caliente después del conciertos. También había un ticket especial por 85 libras (100,95 euros) que incluía además un canapé y bebidas desde una hora antes del evento y asientos reservados.
La pareja se mostró sonriente durante el evento, donde se mezclaron entre los asistentes, y también a la salida, donde fueron fotografiados entre una multitud que les esperaba. Rose lucía un original abrigo de tres colores, azul, verde y amarillo, que potenciaba su tono de piel y de pelo, sobre un vestido oscuro con estampado. Por su parte, Kit vestía completamente de negro con una bufanda de color azul marino.
El ingreso de Kit Harington coincidió con el primer aniversario de boda de la pareja pero, según publicaba People, celebraron esa fecha tan especial en Londres cuando volvió de su estancia en un centro de bienestar. "Pasaron juntos el verano con sus amigos y familiares y el actor parece estar bien. Ella está contenta de que su marido haya vuelto a Londres", aseguraba una fuente cercana. "Mientras estuvo en Connecticut ella intentaba pasar desapercibida y su objetivo era que las cosas mejoraran para el intérprete británico", añadía.