La última edición del DBT de Gran Hermano VIP estuvo marcada -además de por el inicio de la campaña electoral en Guadalix de la Sierra- por los emotivos momentos vividos por las cuatro finalistas al recibir los mensajes de apoyo de sus seres queridos. Algo que Alba Carrillo experimentó con una intensidad especial al ser una cosa que llevaba reclamando mucho tiempo a la organización del programa. Su larga espera finalizaba por fin el pasado domingo cuando Jordi González la recomendaba tener pañuelos de papel a mano por lo que estaba a punto de suceder. La modelo no pudo contener las lágrimas al leer el mensaje de apoyo de su madre, Lucía Pariente, y la declaración de amor de Santi Burgoa. Pero lo mejor estaba por llegar. "Hay más, pero tienes que prometer que me vas a desbloquear de Instagram", le decía el presentador catalán antes de ser sorprendida por una carta de su hijo, Lucas. Unas palabras con las que pretendía firmar la paz entre ambos después de varios años de enemistad.
Su enfrentamiento tuvo origen en 2016, cuando la madrileña abandonó el plató de El Debate de GH 17 entre lágrimas por una discusión con Ylenia Padilla y un desafortunado comentario de Jordi González. Desde ese momento, se bloqueaban mutuamente en las redes sociales y no se dirigían la palabra. Sin embargo, la reconciliación comenzó a fraguarse el pasado mes de septiembre, con la entrada de la colaboradora de Ya es mediodía en la casa de GH VIP 7. "Esta noche voy a ver si puedo hacer las paces con Alba Carrillo... no tiene sentido que estemos peleados", reveló a sus compañeros de Viva la vida en un avance del reality.
Durante el transcurso del programa y las conexiones en directo del periodista todos los domingos con la casa, la relación entre ambos ha transcurrido con cordialidad. Pero el gran momento de su reconciliación llegaba a tan solo unos días de la final y con toda la audiencia como testigo. De una manera completamente natural, Alba y Jordi decidieron pasar página y comenzar una nueva etapa. "Escúchame una cosa. Muchas veces soy tonta, te lo juro por mi vida. Te agradezco muchísimo esta edición porque conmigo te has portado muy bien. Eso también me daba miedo porque, a veces, aunque me quiera hacer la fuerte, soy una sensiblona. Te agradezco muchísimo este concurso por lo bien que te has portado conmigo y, por supuesto, cuando salga te desbloquearé".
"He intentado portarme igual con todos los concursantes", se justificaba el comunicador, quitándose importancia, a lo que Alba, visiblemente emocionada, no tardaba en contestar: "Ya, pero yo tenía mis dudas y eres un gran profesional. Espero que podamos darnos un abrazo un día". "Gran profesional 'de todos los tiempos', te ha faltado añadir", concluía Jordi haciendo gala de su peculiar sentido del humor y enterrando definitivamente el ‘hacha de guerra’ entre ellos.