Estela llevaba más de 80 días pidiendo la visita de Diego Matamoros. La modelo deseaba con todas sus fuerzas reencontrarse con su marido y saber que todo seguía igual entre ellos tras su entrada en GH VIP el pasado mes de septiembre. La organización del programa de Telecinco aceptó anoche su petición, sin embargo, tras su deseo se escondían dos inesperados reencuentros extras que hicieron temblar los cimientos de la casa más famosa de Guadalix de la Sierra, los que tuvo con Kiko Jiménez y Sofía Suescun. Sin duda, el momento más esperado fue el reencuentro entre Estela y su marido, que se produjo después de que esta viese a Kiko y Sofía y acabase bloqueada y confundida por las visitas que acababa de recibir. "Estoy aquí. No va a haber nada que nos vaya a separar. Ni ellos ni nadie", decía mientras su mujer empezaba a llorar abrumada por toda la situación, aunque emocionada de poder ver al amor de su vida. "Te he echado muchísimo de menos. Lo de hoy ha sido muy fuerte", contestaba ella entre lágrimas.
"No te han contado la verdad. Él ha dicho que le gustabas y ha llegado a insinuar que todo era un montaje nuestro. Son unos sinvergüenzas y fuera hemos tenido problemas muy grandes los dos. Son imágenes de hace semanas y estoy bien. Yo no había subido a esto. Me parece horrible lo que habéis hecho. Espero que se lo hagáis a Adara el próximo día. Yo me había comprometido a venir a ver a mi mujer a darle ánimos no a esto que habéis hecho. Es una cerdada lo que habéis hecho", decía muy enfadado con la organización del programa mientras trataba de tranquilizar a su mujer. "Te estoy defendiendo en todo y estoy muy seguro de ti. Me da igual lo que piensen fuera. He estado mal, estuvieron semanas acosándome con esto… Pero ahora estoy bien. Te quiero, te amo y te necesito", añadió
El primer reencuentro que tuvo la concursante fue con Kiko, a quien recibió con gran alegría "a pesar de esperar a Diego". El ex de Gloria Ortega intentó transmitir calma a su amiga, a quien dijo que fuera estaba todo bien y que estaba orgulloso de ella. "Esto es una espina que tengo clavada y que no te pude contar cuando la repesca. Cuando salí vi algunos vídeos y solté algún comentario que podrían sacar para romper nuestra amistad. Yo te quiero como amiga y lo que puedan decir Sofía o Diego no me importa. No puedo decirte lo que era", intentaba sincerarse el extronista alertando a Estela de lo que podría pasar fuera.
"He pasado más tiempo aquí sola que contigo y es increíble lo que me acuerdo de ti", decía ella antes de ver un vídeo recopilatorio de su relación. "En este tiempo igual no he sido consciente de la repercusión que ha podido tener eso, pero estoy muy tranquila y solo me sale sonreír. Al final lo que necesitamos dentro de la casa es esto. Siempre he sentido algo muy bonito, pero desde el máximo respeto. He estado muy segura siempre de lo que siento, pero cuando se empezó a hablar de esto me empezó a preocupar que Diego viese o escuchase cosas que le pudiesen afectar, pero a lo que me agarro con más fuerza es que yo le quiero y él me quiere", se justificaba ella antes de que Kiko la cortase y se mostrase contundente.
"Una cosa no quita la otra. Por mi parte hubo una confusión. Preocúpate por tus sentimientos, no por los de Diego. Nuestra amistad fue a más y punto. Nos hemos dado cariño y muchos abrazos. La realidad es la realidad. Y lo que haya fuera ya tendrás tiempo de solucionarlo. A Sofía ya le pedí perdón y a mi madre, y a mi abuela… Pero preocúpate de tus sentimientos y sé sincera. Eso se premia en un concurso. Tú y yo sabemos lo que tenemos, que nadie te confunda", decía paradójicamente dejándola "mucho más confundida". "No quiero creerme lo que ha dicho, yo no estoy confusa. Me gusta mucho mi vida y quiero recuperarla cuando salga", confesaba más tarde la joven a Sobera.
El reencuentro con Sofía Suescun tuvo lugar minutos después. Estela empezaba pidiendo perdón a la de Pamplona tras ver cómo había reaccionado esta a su relación con Kiko. "Yo he estado aquí dentro encerrada y os puedo llegar a entender. Lo que no me gusta es la mentira, que al final va acabar saliendo. La sinceridad acaba ganando", contestaba Sofía mientras Estela le decía que ella no podía confesar nada que no había tenido lugar "al precio de seguir concursando". Estela se mantuvo firme en su teoría en todo momento y, aunque Sofía trató de que revelase que había sentido algo por su pareja, esta continuó asegurando que no tenía duda alguna sobre su amistad con Kiko.