Noche de confesiones: Adara revela a sus compañeras cuándo le empezó a gustar Gianmarco
La madrileña ha sentido una gran liberación al poder hablar abiertamente de sus sentimientos hacia el italiano
La visita sorpresa de su padre fue un momento realmente revelador para Adara Molinero en Gran Hermano VIP. Además de la alegría por reencontrarse con una persona tan especial para ella, la concursante experimentó una enorme liberación al confesar por fin lo que siente hacia Gianmarco Onestini y su situación actual con Hugo Sierra, su pareja y padre de su hijo. Jesús le pidió a su hija que fuera honesta con ella misma y aclarase sus sentimientos cuanto antes, un sabio consejo que parece que ha empezado a seguir dentro de la casa, tanto con la audiencia -al preguntarle si entendían su relación con el italiano- como con sus propias compañeras, a las que este fin de semana revelaba el momento exacto en que le empezó a gustar.
Si bien la misma noche de la gala la antigua concursante de Gran Hermano 17 ya había confesado a Mila, Alba, Estela y Noemí que le gustaba Gianmarco, en esta ocasión se ha atrevido a ofrecer más detalles de cómo se fraguó su atracción hacia él. Durante una conversación entre amigas en el salón, la madrileña les contó que entre ellos todavía no había pasado nada y que no sabe si está realmente enamorada de él, aunque lo que sí tiene muy claro es que le atrae de una manera muy especial desde hace semanas. "Empecé a sentir que aquello no era normal cuando me cambié de cama. Lo he intentado evitar. Ha pasado ya tiempo y me acuerdo mucho de él", explicaba tímidamente.
Asimismo, señaló que, aunque el participante de Grande Fratello tampoco había confesado abiertamente sus sentimientos, ella tiene claro que es mutuo, porque "eso se nota". "Me hacía sentir especial por cómo me miraba. Yo soñaba con él al principio, pero no le daba importancia".
La realidad es que después de lo sucedido el pasado jueves, Adara ha sentido una gran liberación. "Es muy fuerte esto, necesitaba decirlo", aseguraba ante la expectación de sus compañeras que la han hecho sentir muy arropada en todo momento. "Hablábamos y luego nos pasábamos horas mirándonos. ¿Tú sabes lo que es que alguien te diga que eres un regalo? Antes de irse me miraba por la noche y lloraba. ¿Alguna vez os han mirado así? ¿Creéis que fuera le han cambiado los sentimientos?", preguntaba visiblemente conmovida. Hecha un mar de dudas sobre si está enamorada o no, tan solo Noemí se ha mostrado realista y, alejada de cualquier tipo de sentimentalismo, le ha dicho: "Si tienes dudas es porque no, porque si no, no lo duda".