Barron Trump se hace mayor. El hijo de Donald y Melania Trump ha dejado de ser el chico de rostro aniñado y pelo repeinado con traje y corbata para convertise en un adolescente con el estilo y la vestimenta propia de un joven de su edad. A sus 13 años, el hijo del Presidente de Estados Unidos se ha convertido en el centro de todas las miradas por lo mucho que ha crecido. Después de largo meses sin su presencia en ningun acto público, el joven fue fotografiado junto a sus padres mientras se disponían a tomar un avión para viajar a Florida con motivo del día de Acción de Gracias tan celebrado en Estados Unidos.
A Barron le conocemos desde que nació, en 2006, y sus padres le presentaron en público. Le hemos visto crecer, y en esta última aparición ya supera a sus padres en estatura y ha experimentado una notable transformación tanto física como en su forma de vestir. Lucía una bomber, zapatillas de deporte New Balance, vaqueros y camisa negra, un look muy similar al de cualquier joven de su edad.
Melania Trump ya revelaba hace algún tiempo detalles de su hijo adolescente. "Es un chico mentalmente muy fuerte, muy especial e inteligente. Es independiente y obstinado y sabe exactamente lo que quiere. Es una mezcla de nosotros en apariencia, pero su personalidad es idéntica a la de su padre, por eso lo llamo Little Donald", explicaba en una entrevista. Además de ser muy parecido a su padre comparte con él aficiones como el golf y también desea convertirse en "un hombre de negocios".
Es el pequeño de cinco hermanos y el único hijo del matrimonio entre Donald Trump y Melania. Los otros cuatro son hijos del presidente de sus matrimonios anteriores. Donald Jr, de 41 años; Ivanka, de 37; y Eric, de 35, nacieron de su matrimonio con Ivana Trump y a Tiffany, de 25, la tuvo durante su relación con Marla Maples.
Barron quizá es el más desconocido de todos ellos y el único que vive en la Casa Blanca. Sus padres han tratado siempre de mantenerle fuera del ojo público. Recordemos que con el nombramiento de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos a los periodistas acreditados en la Casa Blanca se les pidió que se respetara la intimidad del menor y Melania, a su vez, decidió quedarse unos meses más en su ático de la Torre Trump, en Nueva York, para que Barron terminara el curso escolar y se fuera adaptando a su nueva vida.