Después de ser sorprendida con el alegato de su madre, Adara Molinero confesó que lo que más feliz le haría sería recibir la visita de su padre en la casa de Gran Hermano VIP. Un deseo que le fue concedido en una de las noches más críticas para ella, a punto de enfrentarse a una posible expulsión frente a Antonio David Flores. Poco antes del momento crucial, Adara se encontraba con su padre, Jesús, protagonizando un entrañable momento en el que abrió por completo su corazón. Después de abrazarse efusivamentea él, este se se sentó frente a ella para exponerle toda la situación. "Lo estás haciendo muy bien, pero hay un problemilla y es que se escucha todo (señalando el micrófono), ¿me entiendes? Lo sabe todo el mundo todo", comenzó su discurso ante la atemorizada mirada de su hija.
"No pasa nada. Te está apoyando todo el mundo. El problema que tienes que resolver es que te tienes que sincerar. O te decantas hacia una cosa o hacia otra, o bien dices que tienes un lio en la cabeza que no sabes ni lo que quieres. Está todo controlado, de verdad. No te preocupes", intentó tranquilizarla a continuación y prosiguió: "Todo lo demás fenomenal. Has estado en todos los sitios y en ninguno. Has estado en minoría y en mayoría. Has estado sintiendo. No sabemos si saldrás hoy, pero tienes que ser sincera y tienes que hacer entender a cierto público por qué actúas así. Seguro que como siempre vas de frente lo harás de una manera".
Unas bonitas palabras de aliento ante las que Adara no pudo evitar romperse y confesar que estaba muy asustada. "No tengas miedo, tú tienes que hacer lo que te diga el corazón y se acabó. No pasa nada y cuando salgas pues ya veremos. No hay ningún problema de nada. El niño está para comérselo, impresionante. Todo fuera está bien, pero tienes que resolver ese pequeño problemilla. Sincérate, tienes que decidir lo que sientes, nada más", le dijo cariñosamente.
"Yo no quería hacer daño a nadie", se excusaba la antigua participante de Gran Hermano 17 y ante lo que su padre le ofreció una solución: “Eso es lo que tienes que hacer entender, por qué alguien actúa de una manera cuando no quiere hacer daño fuera, es lo único”. Asimismo, Jesús le confirmó que quien la está defendiendo en el plató es su madre, Helena, algo que, lejos de tranquilizarla, la preocupó mucho más dado que aquello significaba que Hugo Sierra se encontraba muy molesto con su actuación. “No ha pasado nada grave fuera de momento, tampoco has hecho tu nada grave. Pero al intentar esconderlo, fuera se ha visto lo que tú no eres, una falsa”, le explicaba su padre al verla tan afectada. "No he expresado mis sentimientos porque necesitaba hablar primero con él y porque tenemos un bebé. Ha sido todo sin querer", aseguraba Adara entre lágrimas antes de despedirse.