Se van acercando esas fechas en las que se comparte la felicidad con buenos amigos y familia. La Navidad es momento de brindar y reunirse con aquellos que nos quieren y eso es precisamente lo que han hecho Sara Carbonero e Iker Casillas. La pareja ha encontrado un segundo hogar en Oporto, ciudad en la que residen, y donde está su segunda familia, amigos cercanos con quienes siempre que pueden se reúnen. El grupo ha celebrado la tradición que estas fechas recorre todo el mundo: una comida entre amigos que les ha sentado en torno a una larga mesa. Tal y como comparte Sara y se puede ver en la imagen, eran un grupo numeroso. Los más pequeños tuvieron también su espacio en este encuentro, pues había un pintacaras con el que se convirtieron en fieros animales.
Este almuerzo pone el broche de oro a un fin de semana de descanso en el que Sara e Iker han aprovechado para disfrutar de los peques de la casa. La periodista ha mostrado a sus seguidores el talento que demuestra Lucas para la pintura, con solo tres años. El hijo del deportista ha representado a su madre en una colorida composición, en la que mezcla su figura con múltiples trazos de colores. La orgullosa periodista ha querido mostrar cómo van creciendo sus niños, que son los auténticos reyes de la casa.
Está a punto de finalizar un año complicada para Sara e Iker pero lo hace con buenas noticias. Mientras que el portero va dando cada vez más pasos en su recuperación del infarto que sufrió el pasado mes de mayo, la periodista ya finalizó su tratamiento de quimioterapia al que se sometió de manera preventiva tras ser intervenida de un tumor en el ovario, también el pasado mes de mayo. Se acerca un 2020 lleno de proyectos y que la pareja afronta con optimismo y sobre todo rodeada, como se puede ver, de buenos amigos.
Los cuatro años de Iker Casillas y Sara Carbonero en Oporto