Muy abrigadas se ha podido ver a Irina Shayk y su hija Lea paseando por la calle, bien protegidas por gruesos abrigos debido a las bajas temperaturas de este invierno. Prendas de abrigo que dejaban ver la coordinación entre madre e hija, que iban de lo más conjuntadas para dar este paseo. Mientras que la modelo llevaba un total look en negro, incluso las gafas de sol eran de este tono, la pequeña de dos años y medio también vestía de manera monocromática, pero en blanco. Sí que llevaba unos ligeros toques en color tostado, en la piel de la capucha y en las zapatillas, en las que aparecía un estampado de cuadros, tan de moda actualmente.
Puede que Lea ya empiece a imitar a su famosa mamá en lo que a estilo se refiere, pues tiene en casa a la mejor referente en estilo. La maniquí empujaba un cochecito de muñecas, mientras que su hija también apoyaba su mano en el asa, ayudándola. Sin embargo, después de caminar un rato, Lea se cansó así que su madre tuvo que cogerla en brazos, una misión complicada llevar a la niña en un brazo y el juguete en otro que superó con nota. ¡Una auténtica supermamá!
La niña es una auténtica alegría para sus padres, a los que saca siempre una sonrisa. “Siguen pasando tiempo juntos en familia. Bradley es un gran padre. Siempre ha estado muy involucrado en el cuidado de su hija", aseguró una fuente cercana a la revista People. Tanto para el actor como para la modelo su hija es lo primero. "Está claro que tienen los mismos objetivos. Quieren que viva una vida normal, que esté rodeada de amigos y se divierta jugando. Los dos son padres maravillosos", añadió la citada fuente.
Bradley Cooper e Irina Shayk comenzaron su relación en 2015 y, dos años después, tuvieron a su hija. Este pasado verano se conocía la ruptura de la pareja, que comparte ahora la custodia de su hija.