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La influencer María García de Jaime y su marido, Tomás Páramo, han pasado por un difícil momento esta semana y sus seguidores se han mostrado de lo más preocupados. La pareja reveló, a través de los stories de él, que estaba en el hospital pero no dieron más datos, dejando en vilo a casi 300.000 seguidores que tuvieron que esperar dos días para saber qué era lo que había ocurrido. En un vídeo anunciaba entonces que cuando fue a buscar a su hijo Tomi al colegio se tropezó y se cayó al suelo. Pese a que parecía una caída normal y no se preocupó, las cosas empeoraron más tarde.
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"Cinco minutos después de esto me desmayé en el cole", explica la influencer en su vídeo. "Fuimos a casa, estuvimos un rato, me tumbé a descansar, vomité y se me paralizó media cara y medio cuerpo", continúa con la preocupante historia. "Fue ahí cuando dije que teníamos que ir al médico. Menos mal que fui".
"Llegamos a urgencias, nos atendieron super rápido y me hicieron un montón de pruebas para dejar todo estudiado porque en realidad no sabían lo que era. En la rodilla se veía que me había dado un golpe pero no me había roto nada y era muy raro que un golpe en la rodilla me pudiera dar un desmayo y lo de la cara y todo", ha contado ante el interés creciente de sus seguidores.
Cinco horas después le dieron el alta, asegurando que lo que había ocurrido era que había sufrido un cuadro de estrés. Entonces ha aprovechado para pedirle a sus seguidores que se tomen la vida con más cuidado, con más calma, "que podemos llegar a todo sin ser los mejores". "Estaba blanca como un folio, con los labios blancos, pero todo se quedó en un susto. Lo pasamos bastante mal, pero poco a poco, ya me estoy recuperando", aseguraba la influencer para tranquilizar a sus seguidores.
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La relación entre María y Tomás comenzó cuando ellos tenían 18 años. Cuando ya estaban en la universidad (él estudiando Publicidad y ella Derecho), su vida dio un giro radical con la llegada de su hijo, Tomi. Cambió su vida, pero siguieron juntos y, este año, tras cinco de romance, decidieron dar el gran paso y casarse en una preciosa ceremonia a la que acudieron casi 500 invitados. Entre ellos, sus conocidos amigos Dulceida, María Pombo, y también Victoria Federica de Marichalar, como se pudo ver en la revista ¡HOLA!
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