Sergio García es una de las grandes figuras del deporte español a nivel mundial. El castellonense ha logrado importantísimas victorias en el circuito del golf internacional ocupando durante mucho tiempo los puestos de la cabeza en el ranking. Pero más allá del terreno deportivo, el campeón también ha conseguido triunfar en el plano personal, donde atesora sus logros más importantes. Su mujer es la periodista estadounidense Angela Akins, con quien contrajo matrimonio en julio de 2017, después de algo más de un año de relación. Apenas 12 meses después, la pareja dio la bienvenida a su primera hija, Azalea Adele, una preciosa niña que, en muy poco tiempo tendrá un hermanito, tal y como el propio deportista se ha encargado de compartir con sus miles de seguidores.
"Felices de anunciar la llegada de un nuevo miembro de la familia García en abril de 2020... ¡y será un niño!", es el mensaje con el que anunciaba la buena nueva y junto al que se podían ver unos divertidos gifs en los que aparece haciendo un swing, golpe que levanta una ráfaga de polvo azul, dando así a conocer el sexo del bebé que esperan. Unas imágenes que sus followers han recibido con un gran entusiasmo, felicitándole muy afectuosamente por el próximo nacimiento.
A pesar de sus continuos viajes y competiciones, Sergio ha sabido cómo compatibilizar a la perfección las dos esferas más importantes de su vida. Su mujer y su hija le acompañan siempre que tienen oportunidad e, incluso, ya se ha podido ver a la pequeña ejerciendo como la mejor caddie (persona que asiste y acompaña al golfista entre los hoyos) para su popular papá, que no puede sentirse más orgulloso de su familia. Algo de lo que también ha dado muestra a través de las redes, donde suele publicar numerosas imágenes de las dos mujeres de su vida.
El ganador del Master de Augusta, de 39 años, y Angela Akins, de 35, se casaron en verano de 2017 en el rancho que la familia de la novia tiene en Texas. Una romántica boda que ofreció en exclusiva la revista HOLA, y que supuso uno de los acontecimientos más importantes de la vida de ambos. "El día de la boda, para nosotros representaba la unión de nuestras dos familias y nuestras dos culturas, por eso mezclamos Texas y España en todo lo que hicimos", confesaron felices.