La noche de Gran Hermano VIP arrancaba precedida por el anuncio de una doble salvación, dado que estaban nominados Alba, Aldara, Gianmarco y el Maestro Joao, y solo dos pasarían al duelo final del próximo jueves. El primero en salir de la ecuación fue este último y poco después se confirmaba que el italiano seguía siendo candidato a abandonar la casa. En los últimos compases del directo se conocía que Alba era la persona elegida para acompañarle en la línea de peligro. "Puede que a la tercera sea la vencida", comentaba tras conocer la decisión de la audiencia, que la vuelve a colocar cerca de la expulsión por tercera semana consecutiva.
Resuelta la gran incógnita de la gala, las reacciones no tardaron en sucederse, muy especialmente la de Adara, que no quiere que Gianmarco salga del reality. "Me dolería muchísimo (…) tengo miedo", confesaba a los telespectadores. No en vano, ambos han establecido una amistad dentro de la casa de Guadalix, tan estrecha, que está haciendo temblar los cimientos de la vida personal de la exmodelo, quien ha llegado a hablar con el Maestro Joao de las razones por las que rompería su relación actual con Hugo, el padre de su hija.
Si bien gran parte de los contenidos de Límite 48 horas giraron en torno a la trama de Adara, otra de las protagonistas del directo fue Alba, que además de no recibir la salvación de la audiencia protagonizó un conflicto con Antonio David Flores que posiblemente haya dinamitado su cordial relación de convivencia. Al menos así se lo aseguraba a Jorge Javier poco antes de despedir el programa. Todo porque el malagueño –amigo de Fonsi Nieto- sacaba el nombre del expiloto en una conversación con Mila Ximénez. "No me toques donde me duele, porque entonces vas a ver una leona (…) No haces nada gratis. Has conseguido llegar a la semana nueve sin estar nominado", le reprochaba. Él no quiso entrar demasiado en la discusión, pero sí compartió en el momento algunas de sus conclusiones: "Qué retorcida y qué mala eres. No imaginaba que fueras tan mala. Cómo me arrepiento de haber perdido mi tiempo contigo".
Tiempos complicados para la colaboradora de televisión, que además estos días se ha mostrado contrariada con la decisión de Mila de salvar al ex de Rocío Carrasco en vez de a ella, cuando según su punto de vista lo merecía más, pues llevaba dos semanas en el punto de mira. Resentidos sus apoyos, sin embargo aseguraba estar fuerte y dispuesta a luchar si la audiencia decide que se quede en la casa el próximo jueves de expulsión.
En cuanto al resto de concursantes, continúa el permanente cruce de dardos entre Mila Ximénez y Hugo Castejón, este último ha tachado a Joao de "doble agente" y el astrólogo tampoco ha vivido sus mejores días junto a la periodista, después de que esta le nominara y ambos pusieran en duda su amistad mutua. Más allá de la convivencia, la noche también se reservó un espacio para la "curva de la vida" de Gianmarco, quien se sinceró sobre los momentos clave de sus recién cumplidos 23 años y el drama que vivió durante su infancia a consecuencia del bullying que sufrió por su sobrepeso. Su hermano, en plató, afectado por las palabras del italiano, aseguró que ha pasado etapas duras antes de ser la persona que ahora todos conocemos gracias al programa.