El próximo mes de enero celebrará el cumpleaños de su hija Leona y el balance que Silvia Abascal hace de estos dos años no puede ser mejor. La actriz está feliz con esta etapa tan especial que está viviendo, aunque reconoce que la maternidad es complicada. "Fácil no es... para todas las mamás y para todas las profesiones, pero en la nuestra, como no hay horarios estables, es muy difícil. Y yo bueno, la verdad es que no teniendo necesidad artística o económica, si quiero estar en casa yo paro, y como me he concedido este último año... era lo que me pedía el cuerpo", ha confesado. "Pero claro, a la hora de trabajar me meto en la cama y me siento como un controlador aéreo de todas las cosas que tengo que pensar. Una intenta dar lo mejor de una misma en el escenario o en un rodaje pero, cuando llega a casa, en el nido también. Y es mucha entrega, mucho trabajo", asegura.
Silvia fue una de las protagonistas de la presentación del nuevo Accord Perfect de L’Oréal Paris que se ha celebrado esta semana en Madrid y, como siempre, se mostró muy sincera al hablar de cómo ha cambiado su vida. "Es realmente difícil, pero es tan gratificante... no hay un amor como este. Para mí, es la locura más cuerda o la cordura más loca", dijo durante el evento. Es consciente de que su pequeña Leona es "una niña trampa" porque se lo dice todo el mundo y es que al hablar de su hija sus ojos derrochan un brillo especial: "Es maravillosa". "Dicen que se parece a mí y la verdad es que tengo fotos de ella que también tengo yo. Es como si la viera a ella con mi padre, con mi hermana de pequeñita. Pero luego cambian tanto los niños...".
Respecto a si se va a animar a aumentar la familia, parece que por ahora no lo tiene muy claro: "No lo sé, me lo están preguntando mucho. Tengo momentos que digo sí y otros que digo que no. Habrá que decidirse, pero de momento no lo sé...", explica la actriz madrileña, que reconoce que "hay que pensar en muchas cosas". "Para mí los hermanos son tan importantes que ese sería el motivo fundamental (...) ¿Cómo hacían las familias de antes, que tenían cuatro, cinco...? Pero claro, es que ahora la mujer trabaja igual o más que antes".
La felicidad que te da un hijo no se compara con nada y Silvia lo sabe. Siempre estará a su lado para apoyarla en todo momento aunque reconoce que hay cosas en las que tomará cierta distancia. "Prefiero observarla y, el día que trabaje, observar si se levanta con ilusión y si vuelve a casa contenta. Es lo único que me importa, que sea una profesión que le haga evolucionar, que se realice, que se sienta feliz, que no esté en una rutina... Que esté activa de ilusiones y que tenga ganas de progresar y evolucionar", respondió a la pregunta de si le gustaría que siguiera sus pasos como actriz.
En el terreno profesional, Silvia está en plenos ensayos de la función Ecos, que se estrenará el próximo 14 de noviembre en el Teatro Español. "Es tremenda, dirigida por Livia Pandur y la hago con Nur Levi. Uno nunca sabe el resultado, pero el proceso está siendo tan rico... estoy muy contenta de estar trabajando con estas dos mujeres y con una historia tan potente", contó la actriz que después empezará una gira nacional e internacional y no sabe si se llevará a su hija con ella: "Vamos a ver, no se puede planificar todo... pero allá vamos".