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Michael Douglas se ha mostrado de lo más sincero al hablar de uno de los episodios más dramáticos de su vida. Su hijo Cameron Douglas vivió un infierno, pero no sólo él, sino también su familia, por culpa de su terrible adicción a las drogas. Hoy el hijo mayor del veterano actor disfruta de una vida alejada de todo tipo de adicciones, al lado de su pareja, la instructora de yoga Viviane Thibes, y su hija Lua, que el próximo mes de diciembre cumplirá dos años. Padre e hijo han concedido una entrevista a la revista People para hablar de lo que ha sido para ambos el momento más doloroso de su vida. Un testimonio en el que Cameron narra algunos de los episodios de este desgarrador y, en última instancia, inspirador viaje extraído de sus próximas memorias, Long Way Home.
"Odiaba el daño que veía en mi vida por las drogas, pero simplemente no podía parar", asegura el hijo de Michael y Diandra Douglas, que a sus 40 años, se ha decidido a contar su historia. Cameron comenzó a experimentar con las drogas cuando era un adolescente. En muy poco tiempo, el miembro de una de las dinastías más importantes de Hollywood abusaba de la cocaína y de la heroína. Sus padres se sintieron indefensos y sus multiples intentos por tratar de ayudar a su hijo a lo largo de los años cayeron en saco roto. "Hubo momentos en que la esperanza disminuía ...La vida se convirtió en una sucesión de crisis. Pensé que lo iba a perder ", asegura su padre.
Durante un tiempo Cameron consumía cocaína casi a diario y resistió los ataques inducidos por drogas. "Es el poder disimulado, el dominio que tiene la adicción cuando estás en medio de ella", dice. "Cuando llegas tan lejos, hay un par de opciones: prisión y luego la muerte". Cameron logró escapar de esto último, pero una operación encubierta del departamento de lucha contra la drogadicción le condujo a prisión. En julio de 2010 fue condenado a cinco años de cárcel por delitos relacionados con tráfico de metanfetaminas y cocaína. El juez le sumó a su condena otros tres años más en prisión tras ser sorprendido mientras distribuía drogas dentro de la cárcel. Sin emnbargo, en 2016 todo cambió tras ser puesto en libertad antes de tiempo por su buen comportamiento.
En la actualidad es un hombre nuevo que cría a su hija Lua, de 22 meses, junto a su novia, Viviane Thiebes, de 41 años, instructora de yoga, y desea retomar su carrera como actor. Cameron siente una profunda gratitud hacia su familia por no haberle abandonado y trabaja para ayudar a otros adictos a rehabilitarse. Atrás queda ya la etapa en la que el marido de Catherine Zeta-Jones aseguraba que la adicción de su hijo a las drogas y su encarcelamiento habían constituido "el momento más oscuro" de su vida. Fue realmente duro para él enterarse de su enfermedad, cáncer de garganta, y al mismo tiempo conocer la sentencia de cinco años de prisión de su hijo por tráfico de drogas.
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