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Andrés Pajares ha hecho un repaso de su vida y de su dilatada trayectoria profesional en su recién lanzada biografía, Mis memorias antes de que se me olviden. Un libro que presentó ayer en Madrid durante un acto en el que estuvo rodeado de numerosos compañeros como Martes y Trece, Pedro Ruiz o Santiago Segura, además de otros muchos personalidades del panorama nacional como Norma Duval, Enrique Cerezo o Antonio Resines. A sus 79 años, el actor, cómico, director y guionista es un personaje muy querido en el mundo del espectáculo en España con un gran número de experiencias acumuladas a lo largo de más de 50 años de carrera y que ahora ha querido compartir con el público.
El propio intérprete se mostró muy emocionado y agradecido por la excelente acogida que había tenido la convocatoria: "Ha sido un día muy importante. Solo por los medios que hay aquí, no me esperaba esto. No me esperaba tan buen recibimiento, ha sido una sorpresa… agradable, muy agradable", explicaba ante los micrófonos de los reporteros que no dudaron en preguntarle, en primer lugar, sobre su estado de salud. Operado hasta en 4 ocasiones de la espalda, el protagonista de Ay Carmela aseguró encontrase mejor, a pesar de "tener clavos, como Terminator", aseguró haciendo gala de su peculiar sentido del humor.
"Son unas mini memorias, es posible que haya una segunda parte", puntualizó el que formara pareja artística junto a Fernando Esteso, dejando abierta la posibilidad de ampliarlas. Su carrera profesional, iniciada a finales de los años 50, incluye importantes trabajos en compañías de revista, salas de fiesta, teatro, cine y televisión. Un amplio recorrido del que supo disfrutar de cada etapa. Asimismo, afirmó haber sido muy fácil de escribir a excepción del episodio más duro que recuerda: "La muerte de mi mujer, murió muy joven". Con estas palabras, Andrés recordaba a la que fuera su primera esposa y madre de su hijo mayor, Carmen Burguera, quien falleció en 1973 a causa de un cáncer de pulmón.
Precisamente, su hijo Andrés Burguera Pajares también se encontraba presente en un acto tan importante para su progenitor, a quien quiso dedicar unas cariñosas palabras: "Mi padre es un personaje muy querido y entrañable. Es un orgullo que en España se reconozca a los cómicos porque todos queremos reírnos. El respeto con sus compañeros de profesión es mutuo. Son un colectivo peculiar, hacer reír es muy difícil y por eso la gente quiere tanto a los cómicos". Además, también quiso destacar su papel tras la muerte de su madre. "Yo tenía 5 años y fue un momento durísimo para él, pero tuvo que seguir adelante. Lo que no te mata he hace más fuerte, y él sacó todas sus fuerzas. Cuando lo leí en el libro me emocionó mucho. Me hizo llorar".
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