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La salida de Kiko Jiménez de Gran Hermano VIP ha dejado a Estela Grande sola dentro de la casa de Guadalix de la Sierra. Su acercamiento con el jienense provocó el distanciamiento con las chicas, especialmente con Alba Carrillo y con Mila Ximénez, con quien anoche tuvo un importante desencuentro en directo antes de que su mayor apoyo fuese expulsado. Lejos de amedrentarse, Estela se refugió en Adara, sin embargo, tanto ella como su nuevo apoyo se encuentran nominadas esta semana junto a Irene Junquera.
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De momento no existen datos oficiales sobre los porcentajes ciegos de las concursantes que se encuentran en la cuerda floja, sin embargo, siguiendo la tendencia del último mes, es bastante probable que Adara sea salvada el martes. Algo que dejaría a la mujer de Diego Matamoros junto a Irene en la palestra. Mientras la periodista ha mantenido un perfil más o menos bajo y no se ha metido en demasiadas polémicas – exceptuando un pequeño roce que tuvo con Alba Carrilo-, Estela ha perdido importantes apoyos tanto dentro como fuera de la casa por su amistad con Kiko, que fue expulsado con un 72,9% de los votos frente al Maestro Joao, concursante con un perfil mucho menos potente que el suyo.
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Aunque tanto Kiko como Estela han intentado defender por activa y por pasiva que entre ellos no existe ni ha existido nunca nada más allá de una bonita amistad, fuera de la casa su comportamiento ha sido entendido como una total y absoluta falta de respeto hacia sus respectivas parejas. La situación se ha descontrolado tanto que incluso Diego Matamoros ha llegado a plantearse divorciarse si no consigue llegar a recuperarse del palo y solucionar las cosas con su mujer cuando esta salga del concurso; algo en lo que su padre Kiko Matamoros le apoya completamente. El hijo del tertuliano ha perdido más de 10 kilos desde que su mujer entrara en el concurso. Además, lleva varios días durmiendo fuera de su casa, refugiado en su entorno para tratar de superar esta tremenda crisis matrimonial. Este viernes el joven entraba en directo durante una conexión telefónica con Sálvame Banana, en la que mientras rechazaba tener una conversación con Kiko Jiménez –que se encontraba allí presente- aseguraba que, de lo único que tenía ganas, era de "coger el timón de su vida con o sin Estela".
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