La noche no empezaba bien para Kiko Jiménez y el Maestro Joao. Los concursantes de GH VIP 7 reconocían estar nerviosos de cara a la expulsión, en la que los porcentajes ciegos adelantaban al principio del programa una clara preferencia por parte de la audiencia (72,9% frente a 27,1%). El complicado carácter de Kiko unido a la relación que mantiene con Estela Grande se han convertido en las peores bazas del extronista jienense, que ha conseguido que la audiencia y buena parte de la casa se posicione en su contra. "Me da rabia que se especule sobre mi relación con Estela. Podría entender que lo haga la audiencia, pero que lo haga la gente de aquí que sabe que estamos encerrados… Mila fue la que empezó sembrando la duda. Yo con Sofía llevo 3 meses, ¡pero es que Estela está casada! ¿No se puede tener una amistad con alguien? Si me voy hasta estoy orgulloso de irme porque son unas aburridas, solo duermen y se quejan", decía enfadado el extronista desde la sala de expulsión poco antes de que Jorge Javier Vázquez le comunicase que debía abandonar la casa.
El presentador quiso dedicarle a unas bonitas palabras antes de que abandonase la casa, donde valoró su paso por el GH VIP. "Has sido oro puro para el concurso. Has sido un concursante extraordinario. No me gusta lo que eres ni estoy de acuerdo con lo que piensas, pero ojalá todos los concursantes que entren en un reality lo hagan con las ganas que lo has hecho tú", le dijo. Además, Kiko se pudo despedir en privado de Estela, con quien se dio un cariñoso abrazo antes de decirse adiós. "Tú eres mi Gran Hermano. Te quiero. Nos vemos fuera", decía ella.
Una vez en plató, el polémico concursante tuvo que hacer frente a la cruda realidad. Después de ver más vídeos y de conocer la reacción de Diego Matamoros llegó incluso a plantearse si el marido de Estela y su 'amiga' habían ideado todo desde el principio para generar polémica. "A ver si va a ser un montaje de estos dos y pago yo el pato. Yo al que veo sentado en un plató es a él", comentaba. Mientras tanto, Sofía Suescun le miraba derretida y embelesada y, aunque aseguraba que necesitaba hablar con él y que no iba a pasar la noche a su lado, también reconocía estar enamorada.
Dentro de la casa la inmunidad y el liderazgo se disputó a través del juego de las sillas, que ganaron Noemí y Mila Ximénez. Tras la nominaciones a la cara, Adara, Estela e Irene fueron las concursantes más votadas. Como líderes de la casa Noemí y Mila decidieron renunciar a salvar a su amiga por temor a que subiese Diego 'El Cejas', otro de sus grandes aliados en el concurso. Por otro lado, Joao quiso agradecer su salvación a la audiencia, aunque fuese a costa de la salida de Kiko. Antes de reunirse con sus compañeros el vidente quiso mandar un mensaje a la persona que se ha cruzado en su camino y que hace peligrar su relación con Pol Badía: "He entrado aquí y cuando salga de aquí igual no doy nada, pero a la gente de aquí le voy a dar todo. Todavía me tiemblan las piernas y no sé qué va a pasar con Pol y con la otra persona. A esa persona quiero decirle que volveré a pasarlas redondas con él y que no hay nada decidido y que vi algo en su mirada que me hizo sentir felicidad, no estar contento. Pido que guarde silencio porque daré la explicación que tenga que dar cuando salga de aquí".
Diego Matamoros y Estela Grande, una relación con altibajos