'Riverdale' dedica su estreno a Luke Perry y desvela la causa de la muerte de su personaje
La ficción en la que participaba el actor ha hecho una última despedida con la colaboración de Shannen Doherty
El último adiós a Luke Perry, que murió en marzo de un infarto cerebral a los 52 años, se ha producido esta semana en Riverdale con el estreno de la cuarta temporada de la serie. Todo el mundo se vio sorprendido al final de la edición anterior con el fallecimiento del actor y se tuvo que poner fin a la trama sin dar explicaciones sobre lo ocurrido con su personaje, Fred Andrews. Su última aparición fue en el mes de abril y tras el desenlace de la tercera se daba a entender que seguía vivo, por lo que la primera tarea a la que se enfrentaba la producción en su nuevo curso era despedirse de él.
El capítulo que ha abierto la cuarta temporada se llama In Memoriam y, ambientado en el 4 de julio -día festivo en Estados Unidos-, explica por qué muere Fred Andrews y muestra su funeral, así como las reacciones de todo el reparto ante este triste suceso. En este episodio la realidad se ha difuminado con la ficción y debido a la gravedad del asunto, el hecho de que sea el comienzo del año y aún no se hayan asentado las bases de la trama, y la participación de Shannen Doherty, ha sido inevitable dejarse llevar.
¡Si no quieres spoilers del episodio no sigas leyendo!
A pesar de que Luke Perry murió de algo tan triste y común como un infarto cerebral y que Riverdale está rodeada de un misterio y violencia que la hacen realmente especial, la muerte de Fred Andrews ha sido diferente. El padre de Archie, protagonista de la serie, fallece a causa de un accidente de coche que no se ve en pantalla, atropellado por un conductor que se da a la fuga.
Mientras Fred conduce al pueblo de Riverdale después de un viaje para a un lado de la carretera a ayudar a un conductor que se ha quedado tirado en la cuneta: se trata del personaje de Shannen Doherty, que ha participado en la serie exclusivamente para darle un final digno al actor. Mientras cambian juntos la rueda que se le ha pinchado al personaje, un coche aparece a toda velocidad y casi choca contra la mujer antes de que el padre de Archie la salve, siendo inevitablemente atropellado por el temerario vehículo.
Archie recibe una llamada explicándole lo ocurrido mientras está con su novia y sus amigos y se marcha como puede a contárselo a su madre, Mary Andrews (Molly Ringwald). Debido a que se trata de un día festivo, el cuerpo de su padre no puede ser transportado a Riverdale hasta después así que el joven decide ir él mismo a buscarlo, acompañado por sus amigos, teniendo así la oportunidad de ver el lugar en el que murió. Se encuentra con la mujer a la que Fred salvó y, tras rezar juntos, acude a la casa en la que vive el culpable del atropello con la intención de vengarse. Sin embargo, descubre que el hombre intenta proteger a su hijo que era quien conducía el vehículo responsable de la muerte, al igual que Archie había visto tantas veces hacer a su progenitor.
Archie y Verónica vuelven a Riverdale con el cuerpo de su padre y son recibidos por una multitud que muestra carteles señalando todas las bondades de Fred. El capítulo termina con una dedicatoria para el actor habiendo querido dejar claro que el personaje reflejaba a la perfección el amor, cariño y admiración que sentían todos en el equipo de la serie por Luke Perry.