)
Fue un auténtico ídolo adolescente en los años 90 y, en la actualidad, Keanu Reeves ha vuelto para 'recuperar su trono'. Tras más de dos décadas manteniendose en un segundo plano de la esfera pública hollywoodiense, el protagonista de títulos tan taquilleros como Matrix o Speed está viviendo un auténtico renacer mediático gracias a sus últimos trabajos. El intérprete acudía al estreno del filme Semper Fi en Los Ángeles, para apoyar a su hermana Karina Miller encargada de la producción de la misma. Su presencia en la alfombra roja provocaba una auténtica revolución, dejando en un segundo plano a los propios protagonistas del proyecto, incluida Leighton Meester. Su propia hermana valoraba así el apoyo que ha tenido por parte del artista: "Es maravilloso que esté aquí. Él siempre me ha protegido para que yo siga mi propio camino en la industria", aseveraba Karina a los micrófonos de Enternainmtent Tonight, bajo la atenta mirada de Reeves.
Esta nueva aparición ha vuelto a poner de manifiesto el importante nivel de popularidad del actor, que se está metiendo en el bolsillo nuevamente al público y crítica. Además del tremendo éxito que John Wick 3 ha aportado a la productora Lionsgate (dándole el mayor índice de beneficio en los últimos años), la participación del intérprete canadiense en la cuarta entrega de Matrix ha emocionado a los fanáticos de la saga y a los incondicionales de Reeves. Dos aspectos que han aumentado, aún más, el interés sobre su persona. Precisamente la estrella desvelaba en este último encuentro con los medios una importante novedad acerca de su futuro trabajo: "Ya he leído el guion de Matrix y no me ha decepcionado en nada. Es un proyecto realmente ambicioso".
Este horizonte plagado de trabajo y popularidad ha vuelto a poner en relevancia la interesante faceta personal del atractivo actor. Una esfera marcada por duros sucesos que le convirtieron en, como muchos han definido, la celebritie más 'normal' del mundo del celuloide. Unido a una complicada infancia, manchada por la dureza de la figura de su padre, el actor sufrió importantes pérdidas como la de su mejor amigo River Phoenix, cuando apenas eran unos adolescentes. Sin embargo, el mayor punto de inflexión estuvo marcado por la truncada historia de amor que vivió junto a Jennifer Syme, asistente personal del director David Lynch. Ambos se conocieron en una fiesta, se enamoraron y en el transcurso de su romance, Syme se quedó embarazada de una niña a la que iban a llamar Ava. Sin embargo, la fatalidad se cruzó en su camino cuando, a los ocho meses de gestación, la bebé nació sin vida. Un duro golpe que no pudieron superar y tras el cual acabaron separándose. Un año después, Jennifer fallecía en un accidente de tráfico tras acudir a una fiesta en el domicilio de Marilyn Manson.
Tras la muerte de su ex, Syme, Keanu Reeves no ha vuelto a tener pareja de manera oficial. Esta complicada vida privada que ha marcado su insólita y enigmática personalidad. Ajeno a los influjos de las esferas de poder, el intérprete nacido en Líbano ha hecho de la sencillez, el pragmatismo y la humanidad (donó 20.000 dólares a un operario de Matrix que iba a ser desahuciado) tan impropias en el universo hollywoodiense.
)
)
)
)
)
)
)
)
)
