Sara Sálamo habla de cómo ha cambiado su vida tras la llegada de su hijo Theo
La actriz canaria, que dio a luz al pequeño Theo hace dos meses y medio, asegura que ser madre es más duro de lo que pensaba
La vida de Sara Sálamo ha cambiado de manera radical desde que, hace dos meses y medio, se convirtiera en madre del pequeño Theo, fruto de su relación con Isco Alarcón. La maternidad es una dura experiencia en que está aprendiendo a desenvolverse poco a poco y de la que quiso hablar junto a la periodista Isabel Jiménez durante un acto de una firma de cosmética para mamás y bebés celebrado en Madrid. Allí hablo con total naturalidad de aspectos tan íntimos y personales como el embarazo, el parto y la lactancia, y de cómo la llegada de su hijo hizo cambiar por completo su manera de pensar: "Pensaba que iba a ser la típica madre súper hippie liberal y soy todo lo contrario, soy muy miedosa, muy histérica y con muchos miedos al ser primeriza, pero bueno".
Durante su conversación, la profesional al frente de los informativos de Telecinco mostró mucho interés sobre el hecho de que la actriz decidiera, en un principio, dar a luz en el agua. "Lo cierto es que tenía una visión híper romántica del parto, de cómo quería hacerlo, de volver al origen. Al fin y al cabo, somos mamíferos y quería que fuera un parto lo menos medicalizado posible, que no hubiera intervenciones y no fuera instrumental. Aposté por el agua, aunque luego la expulsión no fue ahí. Fue una experiencia muy dura. Te vuelves realmente un animal. El dolor es tan tremendo que aún lo tengo muy reciente para saber si repetiría", explicó rememorando aquel momento.
La intérprete de Brigada Costa del Sol ha vivido cada etapa del proceso de una manera muy distinta. "Cuando estás sumergida en cada una, te parece la más dura de todas", aseguraba. "Ahora estoy con lactancia materna exclusiva y yo era de las que decía que no iba a dar el pecho porque ni mi madre ni mi abuela lo dieron y siempre tuve claro que quería dar biberón, pero en cuanto vi a Theo escogí esto".
Aunque su día a día ha cambiado, Sara tiene muy claro que la responsabilidad sobre el niño es compartida con el futbolista del Real Madrid. "Mi marido no me ayuda porque también es responsabilidad suya. El bebé es de los dos", expuso tajante. Asimismo, es consciente de la importancia de su vida en pareja por lo que han llegado a un acuerdo para no descuidar esta faceta: "Nos hemos puesto como norma tener una noche a la semana para nosotros, porque los primeros días estaba siempre pegada a la cámara".
La tinerfeña solo tiene buenas palabras para su hijo, del que reconoce que se parece más a su padre. "Theo tiene 'mamitis' absoluta y es guapísimo. Me ahogo en mi propia baba. No pensaba que me iba a enamorar tanto. Me paso horas mirándolo, me tiene absorta". Respecto a ampliar la familia, de momento, se muestra prudente: "Sí que me gustaría repetir, pero tengo tan reciente el dolor del parto que prefiero dejarlo para dentro de un tiempo".