Su relación va viento en popa, tal y como asegura Paula Echevarría en su último evento público. La asturiana se ha encontrado con los medios con motivo de su colaboración con Samsung Smart Girl y ha dado algunos detalles sobre sus primeros meses de convivencia con Miguel Torres, que tras dejar el fútbol puede pasar más tiempo en Madrid con su novia. "La verdad es que da gusto. Hemos tenido un proceso de adaptación porque vino justo cuando terminó la temporada en LaLiga y coincidió cuando llegaron las vacaciones. Hemos estado viajando y volviendo a casa... Ahora es cuando realmente nos estamos situando", ha explicado. Sin dudar ha asegurado que "de momento", el exdeportista es "perfecto".
A pesar de que en un primer momento no vivían juntos por sus circunstancias, dieron el paso en cuanto tuvieron la oportunidad. Paula asegura que tras más de dos años sola no tuvo ningún miedo a volver a meterse en una relación y en la convivencia y que no tiene ninguna queja de Miguel, que ni ronca ni es desordenado.
Además, tal y como ha revelado entre risas y de manera distendida, Miguel cocina de lujo y se reparten las tareas. "Planchar, fregar... ¿Es que crees que el otro ha ido de Gracita Morales? –se ríe– Claro que nos repartimos las tareas. Él ha sido un chico que ha vivido solo muchísimos años de su vida".
Paula Echevarría y Miguel Torres comenzaron su relación en 2017 y, a pesar de que la distancia fue durante casi dos años su mayor impedimento, ahora han dado comienzo a un nuevo capítulo. La actriz es el mayor apoyo del exfutbolista en su cambio de etapa tras haber dejado el deporte profesional y no se pierde sus apariciones como comentarista deportivo, y juntos hacen deporte y salen con amigos, más que establecidos como pareja.
Además, Miguel Torres forma parte al 100% de la familia de Paula, no solo de su círculo de amigos, e incluso va a buscar a la pequeña Daniella al colegio. Debido a ese año y medio que él vivía en Málaga y ella en Madrid con su hija se pudo ir formando una relación entre la pequeña y el exfutbolista para que no hubiera ningún problema cuando llegara la oportunidad de convivir.