Hugo Castejón consigue poco a poco acabar con las fuerzas de los concursantes de Gran Hermano VIP 7. Las constantes peleas que los habitantes de Guadalix de la Sierra mantienen diariamente con él han minado la moral de muchos de ellos, que desean con todas sus fuerzas que el ex de Marta Sánchez sea expulsado esta semana. El cantante fue salvado por la audiencia durante la ceremonia de salvación celebrada el pasado martes, algo que le ha dado una gran seguridad a la hora de enfrentarse a su segunda nominación – ahora contra Dinio y Noemí Salazar. Tras la expulsión de Anabel Pantoja, la tensión con los porcentajes ciegos podía percibirse a través de la pantalla, que al principio de la segunda gala de Límite 48 horas se encontraban en 3,6%, 35,7% y 60,7%.
No han pasado ni dos semanas de concurso y la tensión explota a cada instante. Una guerra por una calabaza, otra por un albornoz… Algo que los propios concursantes no soportan. "Me da vergüenza esta situación. Esto es una central nuclear. Estamos metidos de tal manera en ese agujero que no hay manera de ver la solución. Aquí lo que sea es tremendo, que lo mismo te la liamos por estornudar", comentaba el Maestro Joao durante una conexión en directo. "Os hará mucha gracia allí, pero esta casa es un infierno. Desde que te levantas hasta que te acuestas esto es una batalla campal. Este señor se ha propuesto hacer la convivencia imposible. A él le han dicho que entre a esta casa a dar collejas y desde que se levanta hasta que se acuesta va a por mí", añadía Mila Ximénez poco después.
La situación se ha vuelto tan insostenible que hasta el propio Jorge Javier Vázquez tuvo que intervenir para pedir orden en la casa y llamar la atención al polemista por su altivo comportamiento. "Seguiré hablando, pero es imposible seguir esto. Llega un momento que es desagradable. Pero no sirve de nada que asientas, Hugo, si sigues participando de ello. Como espectador me encanta el conflicto, pero llega un punto en que es cansino. Es que es un coñazo, chico", decía.
Después de conseguir poner algo de orden en Guadalix, el presentador volvió a ofrecer a los espectadores un avance de los porcentajes ciegos, que fluctuaron enormemente durante el programa y se encontraban en 4,2%, 40,6% y 55,2%. "Que se vaya quien decida la audiencia", comentaba Dinio sin querer mojarse antes de que se conociese el veredicto de la audiencia. "Yo quiero que se vaya Hugo, porque nos está haciendo la convivencia imposible y no respeta a mis compañeros ni tiene educación. Creo que por su culpa el concurso no fluye. Ya cansa y tiene que irse él", añadía Noemí. "A mí me gustaría quedarme y que se quede Dinio, así que si tengo que elegir que se vaya Noemí. Yo he sido una persona íntegra y leal y ella no tiene los principios básicos y ha manipulado la realidad. Por eso pienso que se tiene que ir ella", comentaba por su parte Castejón.
"El nominado, con menos porcentajes de votos para la expulsión es… ¡DINIO!", decía el presentador anunciando la salvación del cubano. "No me lo esperaba, de verdad. Soy muy feliz ahora mismo. Le doy las gracias a este programa en todos los sentidos. Yo ya gané con esto. Tenía miedo de que la gente se olvidara de mí, de defraudar a mi mujer, a mis amigos. Gracias a todos por tenerme aquí porque voy a seguir siendo yo", comentaba el concursante antes de romperse tras conocer el resultado de los votos. Una situación que deja un auténtico duelo de titanes de cara a la expulsión del próximo jueves, en la audiencia parece estar cada vez más dividida, pues la gala terminó con un 47,5% frente a un 52,5%.
Evacuación forzosa
Por otro lado, Nuria, la amiga de Omar Montes, necesitó ser apartada del grupo a principio de la noche tras sufrir una fuerte reacción alérgica tras la que poco después Jorge Javier alertó que no iba a volver a casa a dormir. "Por favor, haced su maleta porque no va a volver a la casa esta noche. La decisión sobre la permanencia de Nuria en el concurso la comunicaremos mañana".