Ha pasado ya una semana desde que Carla Pereyra y Diego Pablo Simeone celebraran en La Toscana su boda soñada, un 'sí, quiero' con sabor italiano que ha protagonizado esta semana la portada de ¡HOLA!. "No hay palabras que describan todo lo que pudimos vivir y sentir", aseguraba la argentina, que sigue estando en una nube y emocionándose al recordar su gran día. De hecho, está compartiendo algunos de sus momentos favoritos, imágenes inéditas de todo lo que rodeó a su enlace, en el que sus hijas, Valentina y Francesca, tuvieron también un papel protagonista. Especialmente esta última, quien vivió con intensidad todos los preparativos tal y como ha mostrado ahora la propia modelo.
Francesca acompañó a su madre en todas las pruebas de su vestido, una creación que Maria Grazia Chiuri diseñó para Dior en París. Hasta la ciudad del amor se desplazó varias veces la novia con su primogénita, quien era una de las pocas personas que conocía todos los detalles del secreto mejor guardado de la boda. La mirada de la niña al ver a su madre 'convertida' en una princesa habla por sí sola. Además, protagonizó en el atelier un precioso momento que Carla ha querido compartir. "Dulces sueños", dice la argentina junto a una bella imagen en la que, la pequeña, al ver a su madre con el look nupcial, le entrega una rosa ya que el ramo era lo único que le faltaba para estar lista y poder jurar amor eterno a su papá, Simeone.
Cristales, tul y un mensaje escondido: los detalles del vestido de novia de Carla Pereyra
A pesar de que tiene solo tres años, sus padres quisieron hacerla partícipe de todos los preparativos de su boda europea, celebrada solo tres meses después de su enlace civil, que tuvo lugar en Argentina, el país que los vio nacer a ambos. "Le hemos enseñado vídeos de bodas y sueña con llevar un vestido rosa que vuele", aseguraba Carla en ¡HOLA!. Un deseo que se hizo realidad ya que tanto la niña como sus primas formaron parte del cortejo nupcial vestidas de rosa y con una corona de flores en la cabeza. Además, ocurrente y traviesa no paró de repetir que se casaba "papá, mamá y Francesca".
Ya convertidos en marido y mujer, Carla y el entrenador del Atlético de Madrid tendrán que esperar para cumplir con la tradición y disfrutar de su luna de miel. Sus respectivos compromisos laborales les impiden irse de viaje en estos momentos y lo aplazan para más adelante. "Supongo que nos iremos de luna de miel en algún momento. Aún no la hemos tenido porque no me gusta dejar a mis peques... Así que en cuanto crezcan un poco y se queden con sus abuelos", explicaba Pereyra.