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Tiene una agenda muy apretada y está todo el día de aquí para allá, sin embargo, Lucía Rivera nunca pierde la sonrisa. La moda es su pasión y, por eso, la hija de Blanca Romero y Cayetano Rivera no se cansa de repetir que está feliz porque está cumpliendo su sueño de dedicarse a lo que más le gusta. "Estoy contenta con todo lo que está saliendo, es una etapa fructífera... el esfuerzo tiene su recompensa, siempre lo digo", ha confesado durante el evento que la firma Anekke ha celebrado en Madrid. Estos meses se presentan con mucho trabajo, pero la asturiana reconoce que los afronta "con mucha ilusión, como siempre".
Lucía, que cumplirá 22 años el próximo 11 de diciembre, está acostumbrada a viajar y a estar lejos de sus seres queridos. Tal y como ella misma cuenta: "Desde pequeña llevo distancia con mi familia. Mi madre siempre trabajó fuera, viví un tiempo con mis abuelos... y a mi me gusta viajar. Mi trabajo me obliga y, si no me gustara, mal iba...". Sin embargo, es cierto que es un tema por el que siempre le preguntan y ella siempre responde lo mismo: "Soy muy independiente, hace meses que no hablo con mi padre y hace mucho que no hablo con mi madre. Estoy muy centrada en mi trabajo y mi familia me entiende perfectamente. No tengo tiempo para pararme a pensar en enfados y en tonterías".
De hecho, aprovecha cada hueco que tiene libre para escaparse y disfrutar de tiempo con ellos. Después de que hace unos meses desmintiera que tenía una mala relación con su padre, Cayetano Rivera, la modelo está muy contenta con la llegada de su hermanito. "Es muy guapo, muy risueño... es un encanto de niño", ha confesado Lucía con una gran sonrisa. Respecto a quién se parece, si al diestro o a Eva González, parece que lo tiene claro: "Se parece a los dos. Es una mezcla guay, me gusta".
Si en lo profesional las cosas no le pueden ir mejor, en lo personal tampoco se puede quejar, ya que sigue feliz al lado del piloto Marc Márquez. "El trabajo es lo primero, después el amor. Tenemos tiempo de sobra, además estas carreras son cortas", explicó la asturiana al preguntarle si podían dedicarse tiempo para estar juntos con las agendas tan complicadas que tienen los dos. "Claro que me gusta verle, pero venimos a hablar de moda, que es a lo que me dedico", insistió la hija de Blanca Romero, para añadir que: "Estoy muy feliz y todo va genial, es que no me gusta hablar de esto, me da vergüenza, me pongo nerviosa...".
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