Esperanzados y con confianza en su fortaleza física, así está la familia de Blanca Fernández Ochoa

Hace solo unas horas la Policía Nacional publicaba un mensaje en el que alertaba de la desaparición de Blanca Fernández Ochoa. La exesquiadora fue vista por última vez en el madrileño barrio de Aravaca el pasado 23 de agosto y, desde entonces, nadie ha podido ponerse en contacto con ella ya que su móvil está en casa. Los cuerpos de seguridad han comenzado una intensa búsqueda que se centra en Cercedilla, localidad en la que a primera hora de este domingo aparecía su coche. Un hallazgo que da pistas acerca del posible paradero de la deportista, cuya familia ha hablado para los medios.

Una de sus sobrinas, Paula Fernández Ochoa, ha entrado en directo en el programa Viva la vida, donde ha hablado por teléfono con su presentadora, Sandra Barneda, a quien ha compartido cómo se encuentran tanto ella como sus allegados. "Son momentos difíciles pero realmente no queremos perder ni un minuto la esperanza de encontrarla", comenzaba a decir, demostrando que el optimismo está candente en toda la familia, cuyos miembros se encuentran en su mayoría en estos momentos en el Parque Nacional de la Dehesa, donde se ha instalado una carpa para ellos.

La desaparición voluntaria es la principal hipótesis en la búsqueda de la medallista olímpica

El dispositivo que ha puesto en marcha la Policía Nacional se centra en la montaña, donde tanto las fuerzas de seguridad del Estado como los allegados de la medallista olímpica creen que puede encontrarse. "Blanca conocía perfectamente la zona, es aficionada a la montaña y a pasear por allí. Sin duda, Siete Picos es su casa", ha explicado Paula. Además, ha asegurado que prefieren no pensar en la peligrosidad que entraña esta zona. "La esperanza no la hemos perdido, Dios quiera que la encontremos. Confiamos en que ella es deportista y esperemos que no se haya encontrado de frente el peligro", ha explicado.

A pesar de que ha preferido no hacer comentarios acerca de diferentes detalles como el hecho de que interpusieran la denuncia seis días después de la desaparición de Blanca, lo que sí ha querido es agradecer en nombre de toda la familia el agradecimiento que sienten con "periodistas, ciudadanos, amigos y Policía, que estáis todos volcados en encontrarla y nos transmitís mucho cariño", ha dicho, añadiendo que lo que necesitan en estos momentos es "discreción y respeto".

Poco después de esta conversación era Marcela, cuñada de Blanca, quien atendía a los medios que se han desplazado hasta Cercedilla, donde la propia familia ha subido a la montaña para buscar pistas. "La esperanza no la perdemos, la encontraremos pronto y con un poco de suero y comida todo estará arreglado", ha dicho, demostrando que el optimismo es la tónica que mantienen todos. Además, ella también ha explicado que la deportista tenía otro móvil y que ella personalmente cree que se ha tratado de un accidente ocurrido durante estos últimos días en los que ha habido tormentas. Con gran tranquilidad ha desmentido los rumores que apuntaban a que la primera mujer española que ganó una medalla olímpica no está en su mejor momento. "Ella está perfecta, muy bien, nada de un mal momento anímico", ha zanjado.

También Adrián Federighi, cuñado de Blanca, ha atendido a los medios de comunicación en Cercedilla, donde toda la familia se mantiene unida y está colaborando con la Policía. Durante esta comparecencia ha transmitido en todo momento un mensaje de calma. "Ella es muy solitaria y sale todas las semanas a la montaña sola, que no traiga el teléfono es algo natural, el móvil es algo que suele esquivar”, ha comentado. Además ha dicho que todos los que la conocen cree que "lo más probable es que sufriera un accidente" y ha insistido en que "está en el monte seguro, al 100%".