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Sara Carbonero e Iker Casillas no han pasado su mejor verano tras tener que hacer frente a sus problemas de salud. Sin embargo, a lo largo de este meses en los que el portero se recuperaba de un infarto y la presentadora luchaba contra un cáncer en el ovario, han aderezado los necesarios tratamientos médicos con una buena dosis de optimismo, alegría y ganas. Con este mismo espíritu, Sara se despide del mes de agosto para dar por inaugurado el "nuevo curso" y aunque la cuesta de septiembre suele ser dura, siempre se lleva mejor con unas flores como las que le han alegrado el fin de semana a la periodista.
"Hola septiembre #nuevocurso #nuevatemporada #ganas #slowlife", escribía la toledana junto a una fotografía en la que posa junto a una puerta pintada a modo de mosaico con una cómoda camiseta gris y unas gafas de sol en el escote. Además, ha utilizado la misma imagen para despedir el mes de agosto con un rotundo y nostálgico "agosto se fue". La profundidad en los ojos de Sara hace pensar que está mirando mucho más allá del mes que comienza. Varios rostros conocidos, muchos de ellos amigos de la colaboradora de Deportes Cuatro, han alabado la bonita imagen. "Más guapa", decía Alejandro Sanz o "Siempre guapa, por dentro más todavía", como comentaba Naty Abascal.
Para sobrellevar mejor esta temporada de cambios, uno de sus hijos ha querido levantarle el ánimo con un bonito detalle. En otra de las imágenes que la esposa de Iker Casillas compartió con sus seguidores, vemos al niño entregándole a su madre un precioso ramito de flores silvestres. Con un "buenos días" por título Sara deja claro que no hay nada mejor para comenzar la jornada que estos gestos de los más pequeños de la casa.
Sara Carbonero culmina así un verano, que a pesar de haber sido complicado, lo ha pasado de forma relajada rodeada de los suyos. La familia ha estado tanto en Corral de Almaguer, el pueblo de Toledo en el que creció la presentadora, como en Navalacruz, la localidad abulense de la que procede el futbolista. Allí han disfrutado del campo, de las tardes de repostería y de los viejos amigos. Además, han tenido tiempo de pasar unos días junto al mr antes de volver a Oporto, donde residen desde hace cuatro años. Además en este tiempo, la periodista deportiva no ha dejado de compartir con sus seguidores algunas reflexiones en las que asegura que cada vez valora más las cosas más cotidianas y banales que de repente se convierten "en instantes únicos y mágicos".
El agosto más familiar de Sara Carbonero
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